Entre Estrellas: A Star Wars Fan History I

Recelo

     —Doctora Nema —saludó Anakin, claramente confundido—. ¿Qué está haciendo aquí?

     —Disculpen la demora y la intromisión tan repentina —respondió Nema, mirándolos a todos—. El tiempo es un recurso del que no disponemos mucho, por lo que trataré de ser lo más breve posible. —Presionó una opción en la pantalla táctil de su datapad y el holograma de la instalación separatista cambió y se transformó en la proyección del sistema nervioso de un hombre—. Como bien mencionó el maestro Plo, la operación en cuestión requirió de un elemento capaz de enfrentarse al gran panorama hostil que suponía infiltrarse en aquella instalación, pero nos encontrábamos contra el tiempo y no había candidatos disponibles ni sujetos que cumplieran las estrictas condiciones que exigía la misión, a excepción de uno —presionó otra opción en su datapad, el holograma volvió a cambiar y esta vez se mostró al agente seleccionado. Tenía en el rostro una mirada fulminante, las piernas flexionada en posición de ataque y su gabardina ondeaba a causa del movimiento capturado en la escena estática. Los blásteres en sus manos apuntaban hacia el frente. No hizo falta preguntar su nombre, todos ahí lo reconocieron de inmediato.
     »Este es el agente CE-01 DR, más conocido como el teniente Dans Ryder del 17vo Pelotón de Vanguardia de la 501. La punta de lanza de una nueva esperanza.

     —¿Qué significa esto? —inquirió Riyo, controlando el desconcierto mezclado con enfado en sus palabras.

     —Esto, senadora, es la presentación de un nuevo tipo de soldado no clon: fuerte, veloz, ágil, resistente, inteligente y sumamente astuto; cualidades refinadas de forma natural a lo largo de su vida y mejoradas con un entrenamiento especial. Es un elemento del que no podemos prescindir ahora —su tono fue enérgico, esperanzador, casi con un pizca de orgullo escondido—. Un elemento estratégico destinado a realizar misiones a las que un solo comando tendría dificultades de enfrentarse. Si bien su genoma no fue tratado al detalle como el de los soldados clon y carezca, en ciertos términos, de las ventajas de un jedi, tenga por seguro que se acerca o se encuentra al nivel de uno. Es un agente al servicio de la Repúbica que podría llegar a suplir la presencia de un comandante padawan o de un general jedi en alguno de los escenarios de la Guerra de los Clones. Y todo porque posee una cualidad especial por sobre todas las demás: un instinto de supervivencia tan fuerte que lo ha llevado a escapar de la muerte.

     —¿Cuál fue la necesidad de preparar a un agente así? —preguntó Padmé, posando disimuladamente su mano sobre la de Riyo para calmarla—. ¿No es suficiente con las tropas que vienen de Kamino? ¿Destinaremos más recursos en la formación de elementos militares? ¡Estaríamos alargando la guerra!

     —Al contrario, senadora Amidala —contestó Nema—. Ayudaríamos a acortarla. El teniente Ryder ahora es un activo de la 501, junto al general Skywalker podrá realizar campañas militares exitosas y asestarán duros golpes al bando separatista. Golpes estratégicos, desde luego.

     —Dans estaba gravemente herido hace apenas unas semanas —increpó Anakin, procesando la información en su cabeza—. Recuperarse de algo así llevaría meses y más tiempo aún prepararlo para lo que usted está diciendo, doctora.

     —Se equivoca, maestro Skywalker —replicó Nema con gentileza—. El teniente Ryder se encuentra en su mejor momento —deslizó los dedos sobre la pantalla digital, el holograma se dividió en muchos otros mostrando situaciones diferentes de combate: saltos, giros, golpes; todos y cada uno resaltaba una cualidad específica y respaldaba sus palabras—. Estas son imágenes de la última misión especial realizada por el teniente y, a su vez, la primera tras su grata recuperación. La primera... —hizo hincapié en eso— tras su efectivo reacondicionamiento.

     —El Senado nunca autorizó esto —increpó Riyo, exaltada, mirando con recelo a la doctora Nema—. Usó a mi escolta como experimento, ¿cómo se le pudo ocurrir hacer algo así? Es antiético, es... ¡es...!