- Emma.
- Mi teléfono... - me quejé entre llantos mientras volteaba para seguir abrazando la almohada.
- Él está bien, sólo rompiste la pantalla. Ahora hablemos de...
- ¡No! Está prohibido decir el nombre de ese intento de persona ¡¿Te das cuenta lo que me hizo?! Ugh, lo odio, lo odio tanto.
- Lo amas. Y eso te duele, llámalo por favor. No pienses mal así de fácil.
¿Qué pensarían ustedes si tu novio engañó a su ex con una amiga? Está bien, eso puedo olvidarlo. Pero que ahora esa sucia perra ande arrastrándose como si nada, es algo... bajo. Peor aún si llamas a su habitación y el que termina respondiendo es... ¡Oh, tu novio! Qué sorpresa. Aunque debería decir tu ex novio.
Auch.
Esa palabra duele más que un golpe en los pechos.
Una lágrima, que espero sea la última, se deslizó por mi mejilla y cayó en la pantalla rota de mi celular.
¿Liam valía esto?
Claramente no, no lo valía.
El teléfono vibró innumerables veces en mi mano y apareció su nombre.
- No pienso contestar. - dije cortando la llamada y apagué el aparato.
- Te estás portando como una inmadura.
Sollocé una vez más.
- Es que no entiendo por qué lo hizo.
- Si no entiendes, entonces pregúntale. No seas tonta.
Suspiré y me levanté de la cama única y exclusivamente para ir al baño. A lo largo de la noche supongo que pasé seis horas llorando y lo que resta durmiendo. Así que pueden imaginar el mapache que se adueñó de mi cara...
- ¡Buenos días! - canturreó la reconocible voz de Alli y detrás de ella se escucharon muchas voces.
Genial, mafia completa.
Me armé de valor y abrí la puerta del baño dejando boquiabiertas a todas mis amigas. Seguramente mi pijama rosado de nubes y el nido que había en mi cabello no debió darles buena espina.
- ¿Qué demonios te pasó? - dijo Emily arrugando la nariz extrañada mientras señalaba mi aspecto.
- Liam.
(...)
- Preparen las armas porque voy a arrancarle las bolas y... - Alli mostró la palma de su mano y la hizo un puño llena de bronca.
- No sólo eso, los puercos también, porque pretendo dárselas como cena. - continuó Ana.
A mi derecha, Emily estaba totalmente avergonzada por la actitud de su hermano.
- No entiendo qué le pasó. Juro que se notaba el amor que tenía hacia ti. - dijo llena de pena.
- Ese tipo de hombres son muy buenos para fingir, Em.
- Pero tú... ¿No hablaste con él?
- Me ha estado llamando aunque no contesté nunca.
El sonido de un teléfono nos interrumpió y Emily se puso nerviosa.
- Es él.
Bufé. - Haz lo que quieras, después de todo es tu hermano.
- Está bien. - llevó el teléfono hasta su oreja. - Hola... No pasó nada... ¿Por qué lo dices?... ¿Emma?... Eh... ella... - me miró asustada y negué. - Ella está bien... Debe ser un error... No, no estamos juntas... Tranquilízate, todo está bien... Como digas... ¡No! No vuelvas... Liam, no lo hagas... ¡Oye!
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Conocerte Es Difícil ©
Lãng mạn«Trilogía incluida» Conocer: acción que realiza el sujeto con el fin de tener una noción o idea de algo o de alguien y, así, poder decidir y actuar en relación a ello. El conocer se basa en investigar para obtener información y conocimiento sobre un...