Capítulo 16: Necesito preguntarte algo

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- Lo siento, me tendré que quedar con las ganas. - suspiré.

- ¿Qué? No llegué hasta aquí para que digas eso. - Liam bufó molesto.

- Es que no me va a entrar. - sentencié cruzada de brazos.

- Sólo haz un esfuerzo, Emma.

- ¡No! No puedo Liam, resígnate. Mi boca no es lo suficientemente grande.

- Es una hamburguesa, no molestes.

Lo fulminé con la mirada. - Te dije que quería la simple.

- ¿No era que querías hacerme perder la apuesta para comer en McDonald's? Bueno, aquí estamos. - sonrió cínicamente.

- Eres un idiota.

Comencé a devorar las papas hasta que llegó el momento en que tenía que comer la enorme hamburguesa, iba a matar a Liam.

- Eso te pasa por querer provocarme. - sonrió tomando un sorbo de su gaseosa.

- Pero si yo nunca hice eso... - desvié la mirada.

- Claro, espérame aquí ya vuelvo.

Lo seguí con la mirada hasta que se perdió en un pasillo, seguramente yendo al baño, por lo que continué entre la guerra que la hamburguesa me había declarado.

- Escóndeme de la loca. - dijo un chico desconocido para mí que ocupó el lugar de Liam, llevaba la capucha de su sudadera puesta y unos lentes oscuros que me parecían muy estúpidos ya que era prácticamente de noche.

- ¿Ah? ¿Y tú quién eres? Ese lugar está ocupado.

- Sólo finge que me conoces.

- Pues no lo hago, así que será mejor que te vayas o comenzaré a gritar.

- Emma, ¿Acaso no me reconoces?

Fruncí el ceño. - ¿Debería?

- Ugh, déjame refrescarte la memoria. - sonrió sin mostrar los dientes y se quitó los lentes de sol junto a su capucha.

Me quedé observándolo por un rato, ojos oscuros, cabello oscuro, pero nada. - No. No te conozco.

Soltó una carcajada irritándome.

- Ya en serio, ese lugar está ocupado y no tengo ganas de golpearte. Vete.

- Wow, la pequeña Price se volvió agresiva.

- ¡¿Cómo sabes mi nombre?!

- Sigues siendo algo despistada, pero una despistada muy sexy. - añadió con un tono seductor y lo miré asqueada.

- Lamento ser tan sexy pero solamente tengo ojos para mi novio. - sonreí.

- Mmm, Liam no es un chico para ti.

Me levanté de mi asiento mirándolo de forma intimidante, o eso esperaba. - Escúchame idiota, quiero que te vayas de ese lugar y dejes de parecer que sabes más de mi vida que yo.

- Fuimos a la primaria juntos, Emma. No sé si recuerdas tu primer beso. - sonrió acercándose a mi cara.

Oh, oh.

Flashback

- Oh vamos Emma, no puede ser tan feo.

- Créeme, lo es. No pienso hacerlo. - fruncí los labios.

- ¡Emma! Dijiste que jugarías, ahora debes besarlo. - me gritaron unos chicos.

Bueno, tienes catorce años, no serás virgen de por vida Emma. Hagámoslo...

Conocerte Es Difícil © Donde viven las historias. Descúbrelo ahora