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Capítulo 12: ¡Emma y Liam se van a casar!

- ¡Arriba chicos! - exclamó el abuelo abriendo todas las cortinas de nuestra habitación por lo que la maldita luz me dejó cegada. Con mis ojos entreabiertos lo vi irse luego de realizar su trabajo.

- Liam... - lo sacudí por el hombro.

- Mmm... dejé la televisión prendida. - murmuró con su boca pegada a la almohada, emitiendo voz ronca.

- ¿Ah sí? ¿Te quedas viendo Barnie hasta tarde? - sonreí divertida.

- Barnie es mala influencia, fuma drogas.

- ¡Liam! - solté una carcajada.

Rió con dificultad ya que su pecho estaba pegado al colchón y luego se dio vuelta mientras frotaba sus ojos.

Me miró por unos segundos con una sonrisa tierna, que correspondí.

- ¿Quién es el maldito que me despertó a las... - fijó su vista en el reloj de pared que había sobre el respaldo de la cama. - ¡¿Ocho de la mañana?!

De repente un agudo sonido nos aturdió y rápidamente notamos que se trataba de cacerolas siendo golpeadas.

- ¡Si no dejas eso, juro que voy a matarte! - gritó una voz femenina a lo lejos que seguramente era Emily.

- ¡Levántense todos o iré por la manguera!

Nos dirigimos una mirada rápida con Liam llena de miedo y salimos de la cama en un salto. Desgraciadamente todo aún seguía intacto en la maleta por lo que tuve que lanzar un montón de ropa al suelo en busca de lo que necesitaba ponerme. Unos pantalones azules de algodón que eran para el frío, un suéter y zapatillas fue lo primero que encontré adecuado. Apenas Liam desocupó el baño, entré para asearme y bajamos a desayunar.

- Buenos días chicos... - la abuela nos saludó con una sonrisa radiante mientras extendía unas tazas con café.

- Gracias, Kate.

Nos sentamos en la mesa y preparé unas tostadas ya que ambos moríamos de hambre.

- Espero que se alimenten bien porque nos espera un largo viaje.

- ¿Un viaje? - le pregunté con la boca llena y Liam limpió lo que al parecer era un trozo de tostada de la comisura de mis labios.

- Sí, pensé que Amalia les había dicho. Todos los sábados vamos en familia a un lago que queda a unas horas de aquí. También pueden pescar -cosa que a mi esposo le encanta- y así tal vez aprendas algo útil, Darrell.

Me ahogué con el poco café que quedaba en mi boca. - ¿Darrell? - reí con burla.

- Gracias Kate, ahora me va a torturar hasta que nos casemos.

- ¿Casarse? - preguntó sorprendida.

- ¿Darrell? - olvidé completamente lo que dijo anteriormente.

- Mi segundo nombre es Darrell, como mi padre. Eso pasa cuando no tienes ganas de buscar un nombre original para tu hijo. - sonrió falsamente.

- Lo repetiré ¿Casarse? ¿Se van a casar?

Fruncí el ceño mirando directamente a Liam. - ¿Nos vamos a casar?

Katherine chilló emocionada y salió corriendo de la cocina.

- Era una forma de decir... ¿Por qué enloquecieron tan rápido?

- Ah, o sea que no nos vamos a casar.

- Pues... ahora no, Emma. Somos jóvenes.

- Yo me siento vieja, mi madre se casó a los 16 y tuvo a Luke a los 18.