Capítulo 17: Un corazón roto®

620 33 7
                                    

Emma POV

- ¡Exijo detalles!

Me sobresalté en mi cama cuando escuché el grito de Emily. Detrás de ella entraron Amalia, Brooke y Alli casi corriendo mientras cerraban la puerta de mi habitación.

- ¿Qué haces estudiando en vacaciones? -  preguntó la rubia con el ceño fruncido mirando los libros que tenía frente a mí.

- No estoy estudiando... sólo leía un poco.

- ¡No hablamos de eso! -  la regañó Amalia.  - Cuéntanos qué pasó con Liam ¡Ahora!

- Pues... tal vez volvamos a intentarlo.

Las cuatro chillaron emocionadas provocando que tape mis oídos con fuerza.

- ¡Lo sabía! ¡Él te sigue amando! -  exclamó Amalia y tomó las manos de Emily para comenzar a girar en su lugar llenas de alegría.

- ¿Por qué están más felices que yo? -  reí.

- ¿Hablaste de esto con Max? -  soltó Alli haciendo que cayera en cuenta de ese detalle. Hace como una semana que no sé nada de él.

- No. -  respondí cabizbaja.  - ¿Debo llamarlo?

- Después de todo, ustedes tenían algo más que una simple amistad. Yo creo que corresponde hablar, pero no estoy segura.

Lo pensé unos minutos dejando el marcador en la cama.

Es cierto, hasta podía jurar que en el fondo sí quise que pasara algo entre Max y yo. Pero nunca lo logramos; cuando la situación estuvo a punto de darse, apareció la perra de su ex novia.  El problema es que ya no siento eso. Mi corazón es exclusivamente propiedad de Liam, y odio que sea así. Jamás me gustó que el estado de ánimo de una persona  dependa de otra ¿Y a mí qué? Me estaba pasando lo mismo. Cosa que no me simpatizaba para nada en lo absoluto.

- Chicas. -  la voz asustada de Brooke nos alarmó.  - Liam me acaba de hablar... Jace está aquí.

Liam POV

- Esa mujer va a ser una vieja arrugada con más de doscientos años, y yo la voy a seguir viendo sexy.

- Cállate. -  gruñí tomando el control remoto y apagando la película prácticamente porno que Jace estaba viendo.

- ¿Hablaste con la oxigenada? -  buscó mi mirada mientras se llevaba palomitas a la boca.

Al menos ya no tiene esa cara de amargado, es un progreso.

- Sí, le comenté que habías vuelto.

- Wow. Y ella hizo un problema inmenso al no verme. -  movió ambas cejas sarcástico.

- Deja de ser tan resentido. No tienes idea de lo que pasa por la cabeza de Brooke. Ni siquiera la dejaste hablar una vez que te dijo lo de su ruptura.

- ¡Y la sigues defendiendo! ¿Qué parte de "no le importé un carajo" no entendiste?

- No lo sabes.

- Sí, claro.

El timbre del departamento sonó y fui a abrir la puerta olvidando el hecho de que estaba en pijama.

Su sonrisa invadió mi campo visual antes de tener a Emma sobre mí abrazándome por los hombros. Sonreí apretándola contra mi cuerpo al tomar su cintura.

- ¿Cómo está? -  me preguntó cuando se apartó un poco.

- Velo por ti misma. -  señalé con un movimiento de mi cabeza la dirección de Jace.

Conocerte Es Difícil © Donde viven las historias. Descúbrelo ahora