Enamorado de un idiota (Novela original)

Esposo mio...

Si ves este cap primero ve al anterior que se hizo actualización doble

Fengxiao supo que su idea había funcionado cuando abrió los ojos y se encontró dentro de un lugar cubierto solamente de neblina grisácea, nada más. Así que ese era el subconsciente de Zhiyin y en ese momento estaba completamente vacío. Con razón no podía llegar a él.

Pero debía tener cuidado. Había usado un hechizo para entrar en su mente, uno que tenía muchos riesgos y lo había aprendido de las malas cuando su padre se lo había enseñado. Porque si había algo que tenía trampas ocultas ese era la mente de una persona. Y se imaginó que alguien como Zhiyin las tendría y en grandes cantidades, después de todo era alguien difícil de predecir.

Avanzó con cuidado. Si la conciencia estaba tan vacía como en ese momento, debía haber algo que lo estimulara. Debía buscar con cuidado, eso quizás fuera lo definitivo para hacer volver a Zhiyin. Caminó por un largo rato sin hallar nada. Agradecía que al menos el tiempo allá adentro no significara lo mismo que en el mundo real porque si no su cuerpo estaría vulnerable.

Después de un rato y frustrado por no encontrar nada escuchó entre la neblina un débil llanto. Su cuerpo se tensó y miró hacia todos lados. A lo lejos lo vio. Una pequeña sombra sentada en el suelo abrazando sus piernas hasta el pecho. Fengxiao se acercó lentamente alerta de si había alguna trampa aunque hasta el momento todo había estado tranquilo. No había rechazo hacia su persona.

Cuando estuvo cerca se dio cuenta que lo que estaba delante de él era…un niño. Y no debía tener más de 6 o 7 años. Y lloraba con el rostro enterrado entre sus rodillas. Se arrodilló delante de él.

-¿Zhiyin?- habló suave.

El niño dejó de sollozar de golpe y alzó la cabeza con sus dos grandes ojos oscuros repletos de lágrimas. En un primer momento Fengxiao no lo reconoció. No se parecía al cuerpo con quien estaba ahora, por lo que llegó a la conclusión de que esta era la verdadera forma del alma de Zhiyin, al menos de niño. Se preguntó cómo se vería de grande. De seguro muy guapo.

-¿Quién es usted señor?- la voz del niño era baja pero definitivamente estaba ese timbre y ese algo que solamente Zhiyin poseía.

Fengxiao no pudo evitar sonreír ligeramente de alivio.

-Yo…no, tú eres alguien especial para mí y vine por ti-

El niño se secó torpemente las lágrimas con la manga de su ropa y miró al hombre mayor frente a él.

-¿Señor, usted me va a sacar de aquí?-

Fengxiao asintió con la cabeza y extendió la mano acariciando la cabeza cubierta de cabello que caía a la altura de los hombros del niño.

-¿Por qué quiere que vaya con usted? ¿Por qué soy especial para usted? Yo no soy especial para mis padres ni mi familia. ¿Por qué lo sería para usted?-

El líder sintió que una vena latía en su sien pero se calmó. ¿Cómo demonios habían criado a Zhiyin para que hiciera ese tipo de preguntas. Así que por esa razón estaba en aquel lugar. Al parecer los recuerdos de su niñez no eran precisamente los más felices, al menos desde el punto de vista de un niño.

-Porque cuando seas grande serás la personas que traerá felicidad a mi vida- agarró la mano del niño y lo ayudó a levantarlo para después tomarlo entre sus brazos y alzarlo- Acaso no quieres hacerme feliz-