Capítulo 6:8 -Actividad

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Después de pasar por otras dos horas con la señorita Valentine, nuevamente volvieron las clases con el maestro Patrick, quien viene acompañado por la directora Dalila.

—Muy bien niños, como ya aprendieron a utilizar la técnica de respiración, ¿qué les parece un paseo por la mazmorra?

—¡Sí!

Los niños empezaron a festejar eufóricos, mientras que yo observo atentamente a Dalila, quien tiene un semblante más serio de lo normal. —"Se nota de mal genio" —, Patrick, en un intento por calmar la emoción de los estudiantes levantó la varita y provocó un sonido chirriante, ante lo cual todos los estudiantes se sentaron. —"Parece que ya están familiarizados con ese método para llamar al orden".

—Presten atención. Iremos a las mazmorras y cada uno de ustedes tratará de vencer una criatura del tercer sub-piso, sé que con algunos de ustedes no hemos bajado tanto debido a EPN, pero haremos el intento, ¿de acuerdo?

—¡Sí maestro Patrick!

—¡Muy bien, pasen aquí por sus respectivos sellos de regreso sano a casa!

Mientras que el proceso se llevaba a cabo, convoqué desde mi inventario un guante azul oscuro para mi mano izquierda, sería problemático que me vieran la marca del padecimiento.

Pasaron algunos minutos en los que los cuarenta y tres estudiantes pasaban, pero cuando fue mi turno sentí una mirada algo fría por parte de la peliazul, no obstante, luego volvió a la normalidad y recibimos los sellos correspondientes. En seguida los niños empezaron a formar equipos, intuyo que es algo normal que hacen desde hace un tiempo, pero como soy nuevo estoy en una situación de abandono total.

—No te preocupes por buscar un equipo Arthyr, si tú lo deseas puedes ir solo, eres muy fuerte después de todo.

Patrick me dijo esas palabras al verme solo, pero fue escuchado por Dalila, quien se acercó de inmediato también. —¿Muy fuerte? ¿Qué quieres decir Patrick?

—¿Acaso no lo sabes? Ayer en la noche Arthyr se enfrentó en un duelo amistoso contra Liliam y la derrotó sin problema alguno, es muy habilidoso, casi me atrevo a decir que es un prodigio.

Dalila me miró fijo durante unos segundos, y después volvió a mirar a Patrick. —Evalúalo bien, quizá sus aptitudes a futuro le ayuden a ganarse una beca de estudio gratuito, después de todo es hijo de ella.

—Sí, lo mismo pensé, el talento puede trasmitirse por la sangre después de todo.

—"¿Por qué todo el mundo atribuye lo que yo haga a mi madre? Está bien que sea una gran espadachín y haya participado en la última trifulca con los demonios hace siete años pero deberían dejar su nombre en paz".

Eso también es un tema que se tocó en la clase de historia con Valentine, una historia que me parecía confusa al principio pero que con una explicación logré comprender. El último rey demonio oficial que comandó un ejército fue asesinado por la cortesana del pináculo hace 127 años. Mientras que hace siete años se suprimió un intento por retomar el poder, en el que un demonio de gran poder intentó otorgarse por su propia cuenta el título de rey demonio, ante el mínimo escándalo que provocó el emperador de Chirié envió a sus caballeros más confiables para eliminar dicha amenaza, entre ellos participó mi madre.

Las historias mal comprendidas pueden dar lugar a malos entendidos bastante desagradables, afortunadamente la maestra Valentine nos prestó algunos libros de historia para que interactuemos un poco con el pasado de nuestro mundo. Cuando termine esta actividad le daré un repaso a todo, y lo compararé con los murales que había en la cueva de las súcubos.

—Muy bien niños, partiremos ahora.

Debido a que me perdí en mis pensamientos no me di cuenta del momento en que los niños empezaron a formarse, ni tampoco del instante en que Dalila se retiró del salón de clase.

Con una caminata ordenada detrás del maestro empezamos a dirigirnos hacia la mazmorra, cabe destacar que decidí quedarme de último con el propósito de estar más relajado. Me mantuve en silencio todo el trayecto hasta que ingresamos en la mazmorra, será la primera vez que haré el recorrido como un niño normal y no utilizando hierbas camaleón del cielo para ocultarme de todo lo que encuentre.

Todos los niños empezaron a tomar sus propios caminos, jugando en las primeras tres salas con los slimes inofensivos. Verdaderamente puede llegar a ser entretenido tener por lo menos a uno o dos encima, no como la primera vez que vine, realmente quería matarlos en esa ocasión.

En cuanto cruzamos la puerta para ingresar a la cuarta sala los slimes inofensivos empezaron a saltar con desesperación de las manos de los niños, pues preservar su vida era prioridad. A partir de este punto cada uno dependía o de su equipo o de su propia habilidad.

El primer monstruo con daño que hay en esta sala es el slime verde limón, tiene un leve porcentaje de ácido en su superficie esponjosa al igual que en su interior. Según los cálculos de Google tiene las mismas estadísticas del slime inofensivo, solo que tiene un daño de 4 cada diez segundos que el ácido toque la piel de sus objetivos.

Además, pueden disparar trozos de sí mismos para poder dañar a distancia, este disparo sí tiene un daño instantáneo de 1. Son bastante bajos los daños, lo sé, pero estamos apenas en la cuarta sala del primer sub-piso, era de esperarse.

Algunos niños llevan antorchas, otros llevan lámparas de aceite y otros tienen iluminaciones leves con sus varitas. —¡Iahhh! —, el primer grito fue femenino y provino de la parte grupal delantera, lo que significa que ya empezaron los ataques por parte de los slimes.

—¡Cuidado!

Un niño grita a unos pasos frente a mí, al mirar hacia allí observo como un slime verde limón le salta en el rostro y lo intenta asfixiar, afortunadamente sus compañeros tuvieron una reacción rápida y utilizando una antorcha toquetearon levemente la superficie del slime, provocando que se retire de inmediato de la fuente térmica.

Cuando su compañero estuvo a salvo, el mismo niño que sostenía la antorcha empleó su varita para crear una formación básica. —Calienta mis manos y enciende a mis enemigos, bola de fuego.

Una esfera, no más grande que una pelota de baseball salió disparada desde su varita e impactó al gelatinoso slime, provocándole la muerte al instante. —"Oye Google, ¿cuánto daño hizo esa bola de fuego tan pequeña?".

[Afirmativo. Buscando... buscando... buscando. Encontrado. El conjuro de inteligencia formación bola de fuego convocado por Joe tuvo un daño de 70 puntos a cambio de 7 puntos de aprendizaje]

—Interesante. Me dan ganas de estudiar también las conversiones estadísticas en conjunto con la historia, pero ya será cuando me libre de esta actividad.

ROMUGUVI [Vol. 1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora