Capítulo 8:9 -Ejecución pública

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No puedo evitar sentir un nudo en el pecho, mientras observo cómo encaminan lentamente a Dalila hacia una estaca de madera rodeada de heno y troncos delgados que arden con facilidad. Todos en la academia fuimos convocados para esto, tal y como siempre se ha hecho según la tradición del castigo.

He estado en varias ejecuciones, pero es la primera vez que alguien cercano a mí está allí atado, sobre mis hombros se encuentran los brazos de mi padre, quien también se nota bastante afectado al respecto, madre también se nota bastante destruida mentalmente.

Quisiera estar fingiendo llorar, de verdad quisiera que no fuera real mi llanto, pero es inevitable que se me escapen las lágrimas. Ella fue una buena chica conmigo, a pesar de las palizas que me dio en batalla seguía siendo la misma jovencita talentosa a la que vi mejorar con el tiempo.

El problema fue la responsabilidad con la que ella tuvo que cargar desde el momento en que nació, los Jieonni de verdad parecían estar en contra de cualquier forma de libertad de elección, todos se condenaron en la misma ruta por intentar acabar con el maldito mensajero.

—Unas últimas palabras antes de iniciar tu viaje al Oasis del cambio —, Dupreé es la que se encargará de arrojar la antorcha encendida que dará muerte a Dalila, quien no parece estar muy arrepentida al respecto. Ella está siendo atada a la estaca, con las manos extendidas hacia arriba, mientras que sus ojos solo pueden visualizar a todos los niños que ingresó una vez a sus primeros años de estudio.

—Tú sabes quién eres, y si lo que me dijiste no es mentira, procura hacerlo bien. Puede que sea difícil, pero los sueños se deben perseguir al fin y al cabo, no me decepciones —. En cuanto terminó de decir aquello el sollozo más doloroso nació desde mi alma, como si no solo estuviera llorando yo.

Al girar la mirada puedo observar a varios estudiantes también llorando por la directora que los acogió, no puedo evitar sentirme culpable por la muerte de Dalila, podría evitar que la asesinaran si revelara mis poderes y me fuera en contra de las reglas del mundo. Pero ella me dijo que no lo hiciera, que es un castigo por su fracaso, algo similar al flagelarse uno mismo por los errores cometidos.

No obstante, así mismo como unos lloran por ella, otros ríen en silencio y lo veo en sus ojos, o incluso en la inclinación de sus labios. Dupreé es una de esas que está saboreando el momento y es lo que me llena de repulsión, el desprecio hacia ella por mi parte no puede ser mayor de lo que estoy sintiendo actualmente.

Debo contener inclusive la sangre de dragón que añora escapar de mí para despedazarla, Thyar está presionando para que eso se haga posible y no puedo permitirlo por ningún motivo.

—Eso es todo —, Dupreé arroja la antorcha en el heno y las brasas empiezan a crecer hasta alcanzar el vestido de Dalila, quien empieza a arder pero sin emitir un solo grito de agonía. Mantiene los labios sellados soportando el extremo dolor de la carne al calcinarse, y mientras ella lo soporta yo me derramo de sufrimiento por dentro. El olor a piel quemada me hace temblar inconscientemente y ver cómo sus cabellos empiezan a arder me hiere, es algo peor que sentir el tormento por tu propio ser.

—"No lo soporto más. Yo soy el barquero en este mundo sin oasis, déjame dirigir el destino de los muertos, manipulación del alma" —. Abro la boca y puedo observar cómo surge un espectro invisible que se mueve velozmente hasta el cuerpo ardiente de Dalila, y con un solo tirón arrebata su alma, para posteriormente traerla hacia mí, a lo cual cierro la boca y la resguardo en mi interior.

En los siguientes minutos fuimos testigos de cómo se convertía en cenizas el cuerpo sin vida de la peliazul, mientras que el colectivo afectado empezaba a librar gritos de desesperación y dolencia incontenibles. La ejecución inició en horas de la tarde, ahora ha llegado la noche y la hoguera se ha apagado por completo.

El silencio es ahora lo que reina y la convicción de mi camino queda mucho más marcada en mi mente, destruiré este maldito sistema que irrespeta la vida inocente, ella no merecía morir solo por emplear un poder que ganó de niña, y lo peor es que lo utilizó para intentar salvar el mundo.

Esto no tiene perdón, no los perdonaré de ninguna manera, el alma de Dalila dormirá eternamente en mi interior, así podré saber que sigue viviendo en mi corazón. No dejaré que ella vaya al ciclo de reencarnación y que se pierda entre las infinitas posibilidades que brinda el Color al reencarnar.

Al girar la mirada hacia la derecha puedo ver a Derrien llorando, por lo que observo a mi padre, quien sigue a mi lado brindándome su brazo de padre como consuelo. —Ve —, me dice antes de soltarme, por lo que de inmediato corro hacia ella y la abrazo, es entonces que de sorpresa aparece una pelinegra que también se nos arroja y empezamos a llorar los tres mientras observamos el humo subiendo hasta el firmamento.

—"Te prometo que cambiaré este mundo Dalila, mientras tanto descansa en mi alma" —.

Transcurridos varios minutos todos los espectadores emprendimos marcha de aquel lugar, muchos de nosotros teniendo un mal sabor de boca, y otros con sonrisas de victoria. Tras llegar a casa me encerré en mi habitación, pues sí, a casa.

Debido al incidente nos dieron cinco días libres para poder realizar ciertas reparaciones a la Pedalja, pues la batalla dejó más que simples secuelas en nosotros, la infraestructura del primer piso sufrió graves daños por el enorme poder la directora.

Creo un portal y me transporto directamente a un prado verde a las afueras de la ciudad en que estamos, miro los alrededores y posteriormente realizo la conjuración de réplicas sangrientas, apareciendo noventa y nueve seres con mi aspecto como adolescente, solo que con la piel de un tono rojo carmesí.

Cada uno está diseñado para soportar por sí mismo 10 millones de puntos de daño, y tienen un vencimiento de 7 años. —Ustedes son parte de mí, así que ya saben lo que yo quiero —, sin ningún tipo de tiempo de duda las copias partieron a diversas partes del mundo, con la intensión de llegar hasta el fondo de las más profundas mazmorras y sacar los tesoros en el fondo de estas.

—"Solo falta hablar con Teddier".

ROMUGUVI [Vol. 1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora