ROMUGUVI [Vol. 1]

Capítulo 11:9 - Lo que no se espera

Todos los conjuradores tienen sus manos o catalizadores dirigidos hacia la enorme masa negra, unos tienen bolas de fuego, otras lanzas de relámpago, otras energías puras, pero cada uno reunió una gran cantidad de magia. —¡Prepárense! —. Un hombre perteneciente a los paladines reales estaba al mando en esta tregua temporal, pues ahora todos los soldados escolta real debían ocuparse de ese asunto, ni siquiera los participantes de la federación de milicias tienen el suficiente poder para afrontar esa dificultad imprevista.

—¡Ataquen! —. Cientos de ataques de diferentes elementos salieron disparados hacia la criatura, la onda explosiva fue suficiente como para provocar graves daños a la estructura del coliseo, el sonido eclipsó por completo los sentidos de todas las personas en la ciudad y la columna de humo se alcanzaba a ver desde las afueras de los muros que delimitan el territorio.

Muchas personas están evacuando desesperadamente, sin importarles sus bienes en ese territorio simplemente están saliendo por las puertas principales, comerciantes y personas sin alguna conexión especial fueron los primeros en emprender huida de aquel reino que se estaba hundiendo en la desesperación. Habían estado demasiado tiempo en paz y un problema de tal magnitud sin la debida preparación fue un impacto demasiado fuerte, no estaban listos aun.

—Ya lo hicieron —, Arthyr observa la columna de humo proveniente del coliseo, una sonrisa triunfal está en su rostro y deja más que claro que todo va de acuerdo a su plan. Hardia por otro lado sigue confrontando a las réplicas de sangre empleando esa enorme espada constituida por rocas y escombros; por muy fuerte que ella sea, definitivamente está siendo superada en número, de hecho la están arrinconando lentamente las copias. —"Supongo que no es necesario que continúe en este lugar, volveré con mis padres antes de que se preocupen".

Un portal tras él se abrió, pero antes de que pudiera siquiera atravesarlo sintió un leve tirón en su conexión mágica, entonces volvió a centrarse en sus réplicas y la chica que las estaba enfrentando. Ella dejó de lado su enorme espada de piedra y sacó una espada que se hallaba en una funda con detalles dorados, Esta no mide más de cuarenta centímetros y tiene un diseño similar una onda de frecuencia.

—Son muy pocos los que me obligan a desenfundar mi daga, el picaflor que danza —.La espada de que empleaba antes medía alrededor de un metro con sesenta centímetros y pesaba más de 65 Kels, muy contrario a tal arma cuyo peso es de tan solo medio Kel. No obstante, el aura que emana es varias veces superior a la que desprendía la espada de escombros.

—"No es para tanto, mejor me voy ahor..." —. Un reflejo dorado pasó justo frente a sus narices, permaneció paralizado por un instante, hasta vio cómo su brazo izquierdo, que estaba próximo al portal, se deslizaba hasta desprenderse. —"... ¿Pero cuándo...?" —. Detrás de él se encontraba Hardia, estaba por decapitarlo, pero él encendió todo su cuerpo en llamas profanas con la suficiente potencia para hacerla retroceder.

Al darse la vuelta vio a sus réplicas despedazadas, —"¿Pero cuándo ocurrió esto? ¡Solo me volteé por un segundo" —. Es muy difícil de creer que esté sucediéndole eso, no estaba dentro de sus planes toparse con alguien que lo tomara por sorpresa con tanta facilidad. —"Google, dime cuál es su nivel y sus estadísticas".

[Afirmativo. Buscando... buscando... buscando. Encontrado. Hardia Softia de Lanihí tiene un nivel de 253, salud física 40, aprendizaje 19, aguante 65, fuerza 55, destreza 70, resistencia 35, inteligencia 25 y fe 34. Advertencia. Esta mujer posee entrenamientos que provocan un plus estadístico que no se puede visualizar, es necesario posee una conjuración de análisis profundo para esto]

—"Maldita sea, es más fuerte de lo que aparentaba, es incluso más fuerte que Dalila" —. Arthyr la observa fijamente, y luego observa su brazo cortado, dándose cuenta de que no se está regenerando. —"Mi brazo, ¿por qué no se reconstruye?".

[Advertencia. La espada curva que ella está utilizando tiene un efecto criogénico que ha paralizado por completo sus células, así que no podrá regenerarse hasta volver a una temperatura favorable para la regeneración]

—"¿Qué? ¿Acaso el fuego no vuelve a estabilizar mi temperatura?"

[Negativo. El nivel de congelamiento de esa espada curva es muy superior a las llamas profanas que usted genera, pues su poder se encuentra en el cero absoluto]

—"Parece que no será tan fácil como lo había planeado" —. El enmascarado saca una espada ordinaria desde su inventario, que de inmediato se ve bañada por las llamas profanas. —"De todas formas todo va de acuerdo a su rumbo, lo único diferente es que no me será sencillo retirarme de aquí".

Tras tal pensamiento un imperioso rugido surge desde el interior del coliseo, la columna de humo que se extendió es visible desde todos los ángulos de la ciudad. Tan magno bramido de inmediato apretó el corazón de los habitantes, pues definitivamente provoca una intimidación que llega a lo absurdo, como si una mano les estuviera apretando el pecho con una fuerza abrumadora.

—¿¡Acaso no tuvo efecto!? —. Un conjurador vestido de civil le preguntó al caballero que estaba a su lado, sin embargo, la respuesta se originó en otro lado, pues uno de los apéndices de la criatura le atravesó el abdomen y tiró de él al instante. Casi al mismo tiempo les ocurrió lo mismo a los otros atacantes, quienes se vieron impotentes ante la velocidad de esos tentáculos que los mataron uno a uno y los arrojaron al interior de esa masa oscura.

Más de cien víctimas en un instante, pero lo más aterrador no era el hecho de que los hubiera devorado, sino que sus huesos ahora decoraban la parte superior de ese monstruo que antes fue un slime inofensivo. En un principio estos restos de cadáver estaban totalmente inanimados, pero de la nada empiezan a moverse nuevamente, siendo ahora extensiones de este monstruo.

A través de los ojos desgastados de estos cuerpos ahora puede ver, y entonces empieza la matanza, pues sabiendo que su alrededor es completamente hostil con su presencia no dudará en masacrar a todo lo que se le cruce. Un gran porcentaje de la población no ha logrado escapar de ahí, si no pudieron, ya no podrán definitivamente, pues esa cosa ahora no solo estira sus apéndices para explorar, ahora tiene la firme intención de devorarlo todo.

—¡Debo hacer algo! —. Se grita a sí mismo uno de los pocos magos que sobrevivió, entonces se puso de pie y pretendía atacar... pero...