20 | Baile Bajo Las Estrellas

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Siento la tardanza tuve un gran problema, pero ahora estoy activa y me voy a poner a editar los tres capítulos que debo y subirlos del tirón, espero que disfrutéis con la lectura :)


BAILE BAJO LAS ESTRELLAS

Lucas

No sé porque me gustaba tanto verla, así, con una sonrisa enorme, zampándose de la manera más extraña que he visto, la ensalada. Empezó con todas las aceitunas, tras esto las lechugas, después los pepinillos, los tomates y así hasta comérselas entera.

Nunca me había parecido tan admirable contemplar a alguien simplemente comer.

Estaba tan guapa con esos rizos repeinados, parecía una loca del bosque, una muy hermosa. Llevaba una sudadera verde, que he visto antes, no sé dónde, pero la he visto.

Me gustaba estar con ella, creo que gustar era poco, y sabía que no estaba bien, que fuese algo más, pero creo que es inevitable. Me sentía bien aquí, en este romántico lugar, al principio dude mucho supe que esto era demasiado para unos simples amigos, pero os prometo que fue cosa de Gonzalo. Pero al ver su emoción, se me pasó como si no me importase nada ni nadie más que ella.

No me agradaba nada, de que me sintiera bien, tan bien, de esta forma. Es raro de expresar como de bien era estar con ella como si todas las demás personas no existieran, y como si Olivia no estuviera en mi vida.

Me mata el hecho de que se sintiera tan bien. De qué me importará tan poco Olivia como para indignarme a preguntarla como estaba. Estaba feo lo sé, pero esos eran mis actuales sentimientos.

- ¿No vas a comer? -Me preguntó aún con la emoción.

-No tengo hambre - confesé.

-Yo tampoco y me lo he comido - argumento.

-Eso es mentira -le aseguré con una sonrisa.

-Comételo -insistió.

Expresé mi desgana con una mueca.

-Por favor.

Ahí fue cuando levante la vista para clavar mis ojos en las de los de ella. Como iba a decir que no ha esos ojos.

-Vale - Acepté mientras cortaba el filete.

Ella sonrió y empezó a mirar las luces con fascinación.

-Son preciosas -confesó.

Ella sí que era preciosa.

- ¿Vamos a hacer algo más? -Pregunto.

- ¿Algo más? -Repetí entre risas.

Ella se puso un poco colorada, al entender mis pensamientos.

-No yo me refería a bailar...

- ¿Bailar? -Arqué una ceja.

- ¿Entonces para qué es eso? -señaló a una esquina.

Perseguí su mano hasta acabar en un altavoz con una portátil enchufado. Ahí dios Gonzalo, debería haberle aclarado que tan sólo éramos unos amigos.

-Para bailar -respondí más ameno ante su pregunta.

Me levanté y le extendí la mano, ella me miró con una preciosa sonrisa antes de entrelazar esos fríos dedos con los míos.

Su roce me causaba un enorme y agradable escalofrío, que me tentaba a tocarla más a menudo.

Madre mía Lucas para de pensar así es solo tu amiga, ya tienes novia.

Por que mierda me enamoré de Ti ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora