Un capítulo hermoso con mucho de que pensar <3
¿AMISTAD?
Railey
31 de octubre, como olvidar la fecha del día en el que cometí uno de los peores errores de toda mi, no muy larga, vida. Y lo peor de todo es que lo hice creyendo hacer lo correcto para mí, traccionado todo lo que era, todo lo que me habían enseñado desde que tuve uso de razón.
Aquel día comenzó muy bien:
Alejandro ya está en el avión camino a Wisconsin, de echo puede sacar tiempo para pasar un rato con el antes de subirse al coche que le llevaría al aeropuerto.
Me alegro de que hayamos resuelto nuestro problema antes de que se marchara, no me gusta quedarme con la incertidumbre del "si hubiera"
Vuelvo directica a casa, por el camino me doy cuenta de que pese a que hoy celebran Halloween todo es muy diferente a cuando vivía en Canadá, siento que aquí es como si apenas lo celebrasen, no hay nada de esas decoraciones espantosas en las entradas de las casas, tampoco creo que haya las típicas colas larguísimas de los supermercados y tiendas, repletas de madres comprando esos "últimos retoques", dudo siquiera que haya secciones especiales de Halloween.
Me gusta, nunca lo he celebrado, ni Halloween, ni Navidad, ni Pascua, ni Carnaval, soy musulmana y esa fiesta no tiene sentido alguno para mí.
A veces pienso que hay gente que tampoco tiene idea de que tratan estas, las celebran porque los demás lo hace, viviendo en la ignorancia.
Cada uno debe celebrar lo que se le antoje, siempre con la conciencia de saber que celebra y que no, todos pueden hacer lo que quieran siempre que respete las otras ideas, las ideas de los demás, de esos que no opinan como tú. Cosa que debería verse de lo más normal, es la característica principal del ser humano, la diferencia, la diversidad, eso lo que nos hace ser de carne y hueso, seres con opinión, y no latas andantes. La diversidad es únicamente poder. Tan solo un grandioso poder.
-Railey vamos que llegamos tarde – me dice mama saliendo del hogar, al verme caminar cerca de la entrada de casa.
-Voy – acelero la velocidad y la sigo para subirme al coche.
Patrick está en el asiento del copiloto, comiendo algo, como siempre, y Edward a mi lado, mama se asegura de que llevemos los cinturones antes de arrancar.
-Te he traído el desayuno – me tiende Edward un táper y una bolsita de papel con frutas – hoy has salido muy temprano de casa y sé que no has desayunado.
Cierto quería llegar a tiempo para poder hablar una última vez con Alejandro.
Le sonrió a Edward con el alma en mano:
- ¿Podrías ser más perfectos? – me sonríe con ese hoyuelo suyo.
Abro el táper para encontrarme dos tostadas de mermelada de fresa con pedacitos de chocolate y almendras. Dios hace tanto que no como estas tostadas en concreto que me sorprende el hecho de que se acuerde.
- ¿Te acuerdas? – pregunto fascinada.
-Railey me acuerdo de todo lo que este racionado contigo.
Sonrió con la mirada.
El cuerpo de Edward se acerca, para susúrrame en el oído:
-Como olvidar algo de mi persona favorita en el mundo.
Abro la boca y el empieza a reírse. Le quiero, le quiero muchísimos, y sé que es mutuo.
No existe amor más puro que el reciproco, aquel que puedes ver con tus propios ojos, en sus acciones, sus muecas, en el comportamiento propio de este. Te sientes importante, relevante en un mundo donde la inmensa mayoría solo se mira su propio ombligo, y si además es un amor de compañerismo, de familia. Es simplemente cosa de otro mundo.
ESTÁS LEYENDO
Por que mierda me enamoré de Ti ©
Teen FictionRailey es una chica de dieciséis años con un pasado que creyó haber afrontado. Se muda junto a su familia de Canadá a España con la esperanza de empezar de nuevo. Pero tan solo en su primera semana debe intentar no derretirse frente a su nuevo vecin...