75 | Y ahora quiero besarla

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¿Preparados para más Railey y Alex?

Y AHORA QUIERO BESARLA

Alex

-Buenos días, señorita Meyer – saluda el hombre de telas elegantes.

Mi Railey no deja de sonreír, no le cabe la felicidad en el cuerpo, no para de mirarme con todo el entusiasmo del mundo.

-Ho-hola – responde ella.

El hombre sonreí lícito.

- Soy Eliette Blanchet estoy aquí para servirle, le acompañarte en lo que esperemos que sea un largo tiempo en las empresas de Chistean Dior, bienvenida señorita Mayer – hace una pequeña revejecía, y se aparta, extendiendo la mano al interior del lugar.

Railey contiene un jadeo, mientras se lleva el dorso de la mano a la boca.

La admiró tanto.

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Hay tanta fascinación en los enormes ojos de Railey que el mundo se va a quedar pobre de sentimiento alguno.

-Exhibido por Lily Rose Depp en la alfombra roja en el festival de cine en Venecia en el 2019 – interrumpe Railey al hombre, que eleva las cejas con grata sorpresa al ver que Railey reconoce el vestido lila de gasa y seda.

-Colección otoño/invierno exhibida en Paris en 1949 – nombra al vestido largo pomposo, es blanco, con muchos brillos, parece un vestido de princesa.

-Ese fue utilizado por Ana Taylor Joy en la ceremonia de los globos de oro, donde ganó el premio de la mejor actriz en una miniserie – ahora está hablando de un vestido, simple y elegante, es largo y perlado, sin mangas.

- El "miss Dior" 1949...

-1998 modelado por Naomi Campbell...

La sonrisa no me entra en la cara, el hombre lejos de estar enfadado, veo en el cierta admiración e incluso una ligera diversión, como si estuviera contento de que Railey cocinera cada modelo, cada fecha, cada diseño, alegre de que no fuera una incompetente, sino alguien con conocimiento previo, y lo que parece una cierta obsesión.

El teléfono vibra en el bolsillo delantero de mis pantalones de traje, bajo la mira, vuelvo a elevarla para ver como Railey sigue hablando con el alma en la boca, con un brillo en los ojos.

Sonrió mientras me alejo.

Descuelgo la llamada sin ver la procedencia por ello abro los ojos al escuchar su voz:

-Buenos días, Olga - le deseo de todo corazón.

-Te noto muy alegre cielo ¿me he perdido de algo? – mis ojos no dejan de observar los movimientos de los brazos de Railey al hablar, sus expresiones, como se mueve, ella no habla con palabras, sino con el cuerpo por completo.

-Estamos en salones de Chistean Dior – oigo el estruendo de su alegría a treves del altavoz.

Olga sabía que habían aceptado a Railey, lo hemos descubierto esta mañana, cuando Railey aún yacía dormida, yo ya tenía una estrategia por si la rechazaban, que prácticamente era prestarme en el despacho del regente de selección y reaccionar como viese más adecuando:

A. Hablarle de lo maravillosa que es Railey, hacerle ver todo lo que se perdería.

B. Enseñarle mis posesiones financieras, y ya sabéis darle una muy buena parte para...

C. Acabar con la diplomacia y comprarme una arma, ya vería triunfar a Railey entre las rejas, ¿Qué más daba?

D. Hablarle de quién soy hijo, eso siempre funciona. Pero no era mi opción favorita.

Por que mierda me enamoré de Ti ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora