Por que mierda me enamoré de Ti ©

42 | Dolor de mejillas.

DOLOR DE MEJILLAS 

Railey

Lucas 💙: Hola, hola, hola, hola.

Una sonría se me escapa al ver el mensaje.

- ¿Quién tiene a mi Railey sonriendo como si no hubiera un mañana? -pregunta una voz que conozco bien. Levanto la vista viendo como Pedro se me acerca, con un Outfits de lo más bonito de tonos marrones y sus rizos rubios mojados.

-Hola pedro - mi sonrisa se dibuja con el lápiz más sincero y la adoración más absoluta.

-Hola - el me abraza como saludo, su olor penetra en mí de manera cálida y agradable. Huele a él, a Pedro, nada de fragancias caras u olores químicos, a pedro, uno sin aliento a tabaco, pero si a chicle de hierba buena.

- ¿Nos toca arte? - Pregunto introduciendo libros en el mi casillero. El me ayuda mientras habla.

-No, nos toca educación física - Levantó la vista con rostro de terror y Pedro empieza a reírse. Y por el contrario lo a cuchillo con la mirada.

-Si seguro por esos voy bien vestida con vaqueros - ironizo poniendo los ojos en blanco.

-Te ves bien porque eres preciosa no porque la ropa te haga guapa.

Tonto.

Tonto al que adoras.

Esta vez conocido contigo, subconsciente.

-Lo sé, gracias por recalcar lo obvió -le doy dos palmaditas en el hombro y me dirijo a clase, dejándole plantado.

Escucho sus carcajadas a mi espalda, y no sé por qué, pero me llenan por dentro.

- ¿Que tal con el proyecto? - Pregunta una vez a mi lado.

-Bien, no he empezado, pero sé que voy a hacer, ¿y tú?

-La verdad es que tengo un bloqueo creativo, no sé me ocurre nada - se encoge de hombros.

-Seguro que se te ocurrirá algo antes de que te des cuenta - le aseguro y mis palabras llegan a tranquilizar algo en él. Como si confiara plenamente en mí. Y ese simple acto me baja el alma al suelo. Se siente tan bien, estar con él, es increíble. Y pensar en no haberme acercado aquel día en el callejón del instituto.

Nos encontramos sentados en los taburetes circulares y altos de clase, Pedro está mirando por la ventana a la nada, mientras no para de resonar el ruido que genera al masticar chicle junto a los movimientos cosantes y rítmicos de su pincel chocando con la madera.

Su lienzo sigue blanco, mientras el mío comienza a adquirir un color negro ceniza gracias al trozo de carboncillo que poseso. Rebusco mis auriculares y selecciono mi lista de Lana del Rey, para situaciones extremas, se deben tomar medidas extremas.

Brooklyn baby, parece ser la adecuada para hoy, pulso a reproducir, colocó un auricular en su oreja y otro en el mío, el sigue de espaldas mirando al frente sin darse cuenta de mi presencia.

Hasta que la melodía hace acto de presencia. Me acerco a él, lo abrazo por atrás colocando mi rostro en la línea de su clavícula, al ser tan solo milímetros más alto que yo, no me supone ningún esfuerzo.

Canto cerca de su rostro.

- Yeah, my boyfriend pretty cool.

(Mi novio es genial)

»But he's not as cools as me.

(pero no tan genial como yo)

Su risa se hace sonora al instante en el que se gira sujetándome por lo hombros para empezar a cantar junto a mí.