Jisoo Imaginas

Eres la chica con la que siempre vuelvo a casa

—Me alegro mucho por ti. ¿Lo sabes? ¿Sabes lo increíblemente orgullosa que estoy de ti? —preguntó Jisoo mientras te rodeaba con sus brazos para tirar de ti a través del sofá y sobre su regazo.

Soltaste una risita y ella no pudo evitar unirse a ella cuando te abrazó con fuerza, ahora tan cerca de ti que su pecho vestido te presionaba la espalda.

—Gracias, cariño. Significa mucho—. Dijiste con una sonrisa genuinamente brillante mientras torcías el cuello para devolverle la mirada.

Tenías el mando en la mano y la película cargada. Sólo esperabas que ella te dijera que estaba lista para verla.

Esta película es increíblemente especial para ella. Está tan emocionada por verla que siente que su corazón podría estallar de la felicidad y el orgullo que siente.

Porque esta no es una película cualquiera.

Es tu película.

Es tu primera gran película de éxito. Llegar a este punto ha costado mucho trabajo y Jisoo ha estado ahí para presenciarlo todo y animarte cuando tenías tus dudas de que este día nunca llegaría.

Está tan orgullosa que las palabras no son suficientes para expresarlo.

Ya estás dejando boquiabiertos a los críticos con tu talento, brillando tanto que estás dejando a mucha gente asombrada. Está segura de que nadie ha estado más orgulloso de su hijo/a que ella de ti.

—¿Listo?

—Estoy tan preparada, nena. Estoy tan emocionada de verte brillar—. Dijo antes de besar tu cuello y mantener los ojos en la pantalla mientras tu película empezaba a sonar.

Era una película cálida y sincera. Nunca le diste todos los detalles porque querías que se sorprendiera y, sinceramente, se alegró de ello porque estaba pendiente de cada escena más que de la anterior.

Estaba enamorada de todo.

—Quizás soy parcial pero creo que tu personaje es mi favorito—. Te susurró al oído y comenzaste a reírte, sólo para detenerte cuando llegó una escena en particular.

Te olvidaste de hablarle de ésta.

Es la escena en la que tú y tu enamorado de la película comparten su primer beso. No estaba muy lejos en la película, lo que significa que había muchos más por venir.

No le diste mucha importancia. Es sólo una película y Jisoo es tan fácil y comprensiva que pensaste que no le daría importancia y seguiría viendo la película.

Pero eso no fue lo que pasó.

En cuanto vio tus labios entrelazados con los de la otra chica de la película, se movió incómoda mientras se tensaba y apretaba un poco la mandíbula.

—No me dijiste nada de eso—. Ella refunfuñó y tú pusiste en pausa la película antes de darte la vuelta para mirarla.

—Oh, Jisoo, por favor no me digas que estás celosa—. Te reíste un poco y ella puso los ojos en blanco.

—No estoy celosa.

—¿Ah, sí? ¿Deberíamos ver esa escena entonces? En realidad, no hace falta porque en realidad nos besamos más adelante en la película.

Hizo un puchero y apartó la mirada de ti mientras quitaba las manos de tu cuerpo para poder cruzar los brazos sobre el pecho.

—¡Lo sabía! Estás celosa.

Intentó insistir en que no lo estaba. Pero era obvio que lo estaba y sabe que puedes ver a través de ella.

—Bien. Lo estoy.

—¿Por qué, cariño? Es sólo una película. Es sólo mi personaje.

—Parece muy apasionado—. Murmuró con tristeza pero dejó que desplegara sus brazos y tomara sus manos entre las tuyas.

—Eso se llama actuar, Jisoo.

—Sé que es ridículo que esté celosa pero no lo vi venir y no me gusta ver a mi chica besar a otras chicas, aunque sea para una película. Me costará acostumbrarme, ¿vale? Porque sé que esta es tu pasión y que conseguirás más papeles de este tipo y nunca seré el tipo de novia que te diga que no puedes o no debes aceptarlos sólo porque implican que beses a otra persona.

Pusiste tu frente sobre la suya mientras hablaba, encontrando adorable cómo estaba celosa y a la vez tan dulce cómo quería dejar claro que intentaría adaptarse a ello con el tiempo porque quiere que vivas tus sueños como tanto te mereces.

—Te quiero demasiado como para hacer eso.

—Lo sé. Entiendo que te haya pillado desprevenida. Siento no habértelo dicho.

—No pasa nada—. Ella sonrió mientras rozaba sus pulgares por tus mejillas.

—Sólo recuerda que estos son mis personajes. Eres la chica con la que siempre vuelvo a casa. Siempre lo serás. No hay necesidad de estar celosa. Soy toda tuya.

Su sonrisa creció y te derritió el corazón.

—Eso me encanta—. Sonrió mientras te atraía para darte un dulce beso. —Te quiero, mi preciosa niña.

—Yo también te quiero, Jisoo.