Jisoo Imaginas

Reina del drama

-Pobrecita -suspiró Jisoo mientras te frotaba la espalda y tú tosías en el codo.

Tenías unos pañuelos de papel en la mano libre y te sentabas a pesar de lo mucho que te dolían los músculos y de que temías por la fiebre.

-Te ves miserable.

-Me siento miserable-. Dijiste mientras terminabas de toser, sólo para estornudar en uno de los pañuelos que tenías en la mano.

Te desplomaste en la cama después, tan agotada y enferma que sólo querías dormir hasta que la gripe que has tenido durante los últimos días abandonara tu sistema.

Según el médico, pasarán un par de semanas hasta que eso ocurra, y ese día no podía llegar pronto.

Cerraste los ojos cansados, tratando de recuperar el aliento después de toser tanto y tan fuerte.

-Me duele la garganta-. Gemiste. -No me he sentido tan mal en mucho tiempo.

-Lo sé, cariño-. Jisoo dijo mientras su corazón se hundía.

Siempre le rompe el corazón verte tan miserable cuando estás enferma.

Siempre se esfuerza por estar a tu lado y trata de hacer todo lo posible para que te sientas mejor.

Te moviste al lado de Jisoo, incómoda, moviéndote despacio y con cuidado por lo mucho que te dolía el cuerpo.

Cerraste los ojos mientras ella se acercaba a ti, rozando suavemente con sus dedos tu piel febril.

-¿Puedo hacer algo para ayudarte? - Preguntó y te vio negar con la cabeza.

-Creo que podría morir.

-No digas eso, cariño. No te vas a morir, pequeña reina del drama.

-Me siento así. Me siento tan mal.

-Es sólo la gripe, T/n -se rió. -Te vas a poner bien. Estoy aquí contigo. Voy a cuidarte y quedarme aquí hasta que te sientas mejor.

Abriste los ojos y la viste mirándote fijamente.

Una pequeña sonrisa se dibujó en sus labios cuando sus ojos se encontraron.

-Gracias.

-Para eso estoy aquí-. Dijo, besando tu mejilla. -Pareces agotada. ¿Por qué no intentas descansar un poco?

Giraste la cabeza para apartar la vista de ella antes de llevarte el codo a la boca para toser en ella mientras un cosquilleo aparecía en tu garganta.

Empezaste a temblar, así que Jisoo te subió las mantas hasta los hombros antes de arroparte y besar tu frente.

-Si necesitas algo, estaré aquí.

-Te amo-. Murmuraste mientras empezabas a dormirte, sintiendo calor con ella tan cerca de ti y con las mantas con las que te cubría.

-Te amo más-. Susurró mientras te veía dormir.