Jisoo Imaginas

Bombardeada por los paparazzi cuando estás embarazada

—No, ¡déjame llevar eso! —dijo Jisoo mientras se apresuraba a tu lado, cogiendo la bolsa de la parte trasera del uber que te disponías a tomar.

Pusiste los ojos en blanco, molesta, mientras ella agarraba todo para asegurarse de que no pudieras levantar nada.

—Jisoo, no me hará daño a mí ni al bebé si levanto una de las bolsas de lona llenas de ropa. No son tan pesadas.

—No me importa. No voy a correr ningún riesgo—. Dijo antes de besar tu mejilla, provocando que tus labios se dibujen en una gran sonrisa. —¿Estás emocionada por ir a este viaje?

—¡Sí! ¡Va a ser increíble! —Dijiste emocionada.

Jisoo se alegró mucho de verte tan feliz.

Mientras tomaba tu mano en la otra, la sostenía con fuerza mientras sus ojos se dirigían a tu estómago.

No estás muy adelantada, pero tienes una barriguita muy bonita y ella no se cansa de verla.

Estaba deseando que llegue este día. El día en que por fin podian irse de vacaciones juntas.

Ha sido muy buena asegurándose de reducir su agenda.

Se niega a hacer mucho en ciertos días, el día que sabe que no puede faltar como las citas y cuando no te sientes muy bien.

También se asegura de estar en casa a una hora determinada cuando va y se atiene a eso todos los días que tiene algo que hacer.

Se niega a perderse nada.

Pero, dicho esto, las chicas tienen algunas cosas en marcha y, aunque se lo toma con calma, no está segura de cuándo tendrá la oportunidad de llevarlos de viaje antes de que su pequeño venga al mundo.

Así que está decidida a hacer de estas vacaciones algo que nunca olvidarás.

—Yo también —sonríe.

Pero en cuanto entraron en el aeropuerto, sus sonrisas se desvanecieron al encontrarse con una cantidad abrumadora de fans y paparazzi dentro.

Jisoo maldijo en voz baja y dejó claro el fastidio que le producía que todos estuvieran tan cerca.

—Por favor, retrocedan. Déjenos un poco de espacio—. Dijo mientras te soltaba la mano para rodearte con su brazo.

Los fans escucharon.

Pero los paparazzi no lo hicieron.

Continuaron tomando fotos de ti y Jisoo, así como filmando cada uno de tus movimientos.

Los paparazzi siempre han sido una gran molestia para ti.

Pero ahora que tienes un bebé en camino, se ha vuelto aterrador y siempre te preocupas por tu seguridad, la de Jisoo y la de tu bebé.

Por supuesto, Jisoo nunca dejaría que pasara nada.

Sin embargo, ella entiende tus miedos.

Los comparte.

Siempre le preocupa que la gente se pase de la raya.

El vuelo iba a embarcar en pocos minutos.

Tuvo un comienzo tardío y le preocupó que terminara perdiendo su vuelo.

Eso no iba a ser una preocupación ahora, pero como no pasaría mucho tiempo hasta que subieras al avión, parecía una bendición disfrazada, ya que eso significaba escapar del caos mucho más rápido.

—No te preocupes, mi amor. Iremos a facturar y luego podremos subir al avión. No pasa nada—. Aseguró mientras te besaba la cabeza.

Sin embargo, la tranquilidad que te dio se desvaneció rápidamente cuando un par de paparazzi se acercaron demasiado para tu comodidad.

Jisoo siguió diciéndoles que se alejaran y te dejaran en paz, pero no le hicieron caso.

En cambio, uno de ellos se acercó a ti.

Se acercó a ti desde un lado, empezó a hacerte preguntas e incluso intentó ponerte la mano en el estómago, a lo que Jisoo protestó rápidamente.

Además, uno de ellos se acercó más a ti y los flashes de las cámaras, así como el bombardeo que te hicieron, te abrumaron.

Dejaste de caminar y te esforzaste por recuperar el aliento debido a la ansiedad que sentías.

—¿Estás bien, cariño? —susurró Jisoo.

Negaste con la cabeza.

—Estoy abrumada—. Murmuraste.

Jisoo apretó la mandíbula mientras seguían acercándose, intentando entrometerse en su conversación y capturando diferentes fotos de Jisoo colocando su mano en tu estómago mientras intentaba calmarse.

—T/n, Jisoo, ¿a dónde vas? —preguntó uno de los paparazzi.

Y, enfurecida, Jisoo se dio la vuelta para mirarlos con la mandíbula aún apretada.

—¡No es asunto de ustedes! —gritó.

Los fans y los paparazzi se quedaron sorprendidos.

—¿No veis que sólo estamos intentando facturar y embarcar en nuestro vuelo? ¡Sólo queremos subir al avión en paz! Lo están haciendo muy difícil. Están asustando a mi chica, que está embarazada. ¿No tienes ninguna consideración por nadie? Danos un poco de espacio.

Retrocedieron, para sorpresa tuya y de Jisoo.

Empezaron a caminar de nuevo, de la mano.

Todavía las fotografiaron y filmaron, pero no las bombardearon y se sintió como si se hubieran quitado un peso de encima.

—Creo que les has asustado.

Se rió y se encogió de hombros.

—Les dije que siempre los mantendría a salvo a ambos. Quiero mucho a mis dos bebés. Nadie volverá a acercarse tanto, te lo prometo—. Sonrió y te besó la mejilla, queriendo decir cada palabra que decía.