Miki nunca había sido buena para tomar buenas decisiones, todos deberían saberlo; en especial Draco, que vio como la oportunidad de sus ojos se desvanecía cuando la estúpida e impulsiva de su prima se bebía el frasquito de felix felicis frente a sus ojos cuando amenazó con hechizarla para que se lo entregara.
La próxima vez haría algo antes de advertirle.
Después de eso, el único heredero Malfoy dejó a la pelinegra a su suerte, no le importaba lo que hiciera bajo los efectos esa poción, la muy estúpida le había quitado su única salida como la niña caprichosa que era.
Ahora Miki caminaba por las afueras del castillo para ir hacia la cabaña de su gigante amigo, a quién no veía desde hace un mes, definitivamente él fue una de las pocas personas que permaneció a su lado desde el comienzo de año a pesar de escuchar historias horribles por parte de Ron.
—¡Hagrid! Mierda, ¿ la araña se murió?—Soltó la chica de pecas sin pensarlo, aunque no podía hacerlo, las palabras salían solas—Lo siento, empezaré de nuevo... lamento tu pérdida
Hagrid sorbió sus mocos despues de sobresaltarse al escuchar la voz de la menor.
—Algo la ha asesinado, Miki—Lloriqueo mirando el cuerpo del arácnido—Gracias—susurró cuando sintió unas palmaditas en la espalda.
Miki hizo una mueca para tratar de reconfortar, pero unos extraños ruidos y gritos detrás de ellos llaman su atención, al voltearse no pudo evitar sonreír al notar como el de lentes se acercaba junto al profesor de pociones ¿Qué estaba pasando?
Independientemente de eso, la chica creyó que Harry lucía más atractivo que de costumbre, el rojo le sentaba muy bien, no puede evitar morder su labio inferior al recordar como ese era su color favorito.
—¡Por las barbas de Merlín! ¿Es una acromantula de verdad?—preguntó el Slytherin admirando al animal en el suelo
—Era una acromantula—Corrige la pelinegra mirando el inmeso cuerpo del animal para pasarse una mano por su planchado y perfecto cabello.
ESTÁS LEYENDO
𝐓𝐇𝐄 𝐆𝐑𝐄𝐀𝐓 𝐖𝐀𝐑 - harry potter
Fanfic-Una vida de miseria para todos a quienes apoyaran al señor tenebroso eran las palabras que le repita su padre desde que era bebé pero, por alguna extraña razón, eso no le atemorizaba. Siempre supo que había algo más, algo que no le decían pero la...