VOICE // Joshler

31

Me besó ... Y me gustó

Tyler estaba rodando de un lado al otro sobre la cama con una sonrisa en los labios. No fue hace mucho que llego a casa, había tomado un taxi amarillo como los que hay en america, y durante todo el camino había tenido la misma sonrisa. Sus padres actuaron extraños cuando llegó, por lo que rapidamente narró hechos que jamás sucedieron, terminando por asegurar a ambos que acordó otra sesión para una prueba sustitoria.  Que con el maestro es con quién había estado.

Ahora, que se dirigía a la regadera, reconoció la razón de su calma. Había retirado el cuadro de Jesucristo de su habitación, lo hizo apenas puso un pie dentro de la alcoba. No podía conservar algo tan significativo ahora que había condenado su alma a una larga temporada en las sombras. 

No importa

Mientras se ponía las sandalias de baño, acomodó un poco de loción acondicionadora sobre sus manos empezando a frotar en círculos relajantes todo su cabello. 

Planeaba utilizar el día falso para que Lovely visitara a Josh. Y vaya se sintió todo un Moriarty en esto. Lo tenía acorralado, y de cada lado recibiría atención.

Cuando el agua cayó sobre su cuerpo, abrió los ojos. 

¿Quién era Lovely, realmente? No eran sus inseguridades, de ser estas Lovely se representaría de rojo y negro. Estaba convencido de eso, de niño esos eran los colores que designó su psicóloga a sus emociones.  Este nuevo personaje, Lovely, que sin querer ya hasta tenía nombre, era un lado desconocido, uno que antes no sabía que existía. Alto, tampoco es como si quisiera vestirse de mujer ahora mismo o cambiarse de sexo. Estaba bien siendo un chico, le gustaba ser un chico, en cierto punto siempre le habían atraído las chicas. Las chicas rudas, de esas que te dejan tocarlas sin importarles mucho, así que homosexual, nato, no era. 

La primera vez que vió a Josh, lo atrajo sí y mucho, de eso estaba seguro. Pero no era ese tipo de atracción, era curiosidad, mucha curiosidad. Ahora las cosas habían cambiado, de eso también estaba seguro, pero nadie tendría que enterarse ¿no? 

De pie frente al espejo en su habitación, se encontro con otra sonrisa. Una sonrisa pequeña y dulce, una sonrisa de "no pasa nada" . Todas las personas tenían  uno que otro secreto, tal vez Josh podía ser su secreto. 

La primera vez que Josh lo habia besando pensado que era un chica, él se había sentido muy avergonzado, sucio y tan pecador que no había encontrado valor para encontrar su reflejo en el espejo, por días. Luego, cuando fue a visitarlo sintiendose culpable, Josh lo recibió con un beso, cariño que se negó aceptar. Pero ahora, ahora tenia una sonrisa en sus labios y no se la quitaría nadie. Si bien Josh no lo habia besado directamente en los labios, había acariciado su piel y tocado con sus labios la sensibilidad de su cuello hasta dejar tembloroso todo su  cuerpo. Y lo había hecho sin que él, Tyler Joseph, llevará una falda ni cabello rosa.

¿Yo le gusto? ¿Me gusta él?

Bien, tal vez demoraría un poco en decir esas frases en voz alta. Era difícil, vaya que lo era. De tan solo pronunciar esas palabras se alejaba la idea, no haría eso. No estaba deseando eso. No estaba buscando eso. No quería que le guste alguien.

Salió del baño apresurado, hoy le contaria todo a su madre. Ella sabría escucharlo, convencido, se puso lo primero que encontró y bajó las escaleras muy rápido.

En el camino chocó con algo, alguien.

—Hijo —hubiera retrocedido, si no hubiera quedado sepultado entre los brazos de su padre. Antes de poder reaccionar un beso se poso sobre su cabeza, con afecto. —Mi muchacho.

Vaya, las mentiras hacen feliz a las personas ¿Por que Dios las prohíbe?

Encontrando su mirada, se alejó con prudencia. —Ire el viernes alrededor de las seis al Peterson, la prueba se...

—Mi hijo. —repitió el hombre, la mirada fija sobre sus ojos. —Mi hijo ya es un hombre.

En ese instante podría jurar que su padre hablaba de otra cosa, pero decidió ingnorarlo, sonrió para él y se contagio de su buen ánimo. Al parecer las cosas solo mejorarían.

***

Las cosas solo podían empeorar; primero, un cargo extra; segundo, había olvidado las regaderas. Ahora mismo, Josh se encontraba terminando de trapear el piso apresurado, con maldiciones y a regañadientes.

¡Joder!

Era injusto. Había planeado corregir los libretos está noche, aseguró a Brendon que los tendría listos para mañana, y no lo conseguiría. No podía con el cargo, solo lo había aceptado para verse menos patético frente a ella, y aquí estaba, quitando la mugre de entre los bordillos. Siendo lo peor que se puede ofrecer ¿De dónde sacaba las esperanzas de una oportunidad? él no la alcanzaría.

Las chicas como ella no se fijan en esto. Con estos pensamientos tiró la cubeta de una patada, el agua sucia corrió sobre la loseta recién enserada, y mientras estrujaba sus pantalones observó con recelo la otra cubeta vacía.

Mierda

No habría ensayos mañana, no. Los suspendería con algún pretexto. Necesitaba terminar todo este desorden. Ahora solo demoraría más.

Pensó en llamar a Tyler para que lo ayude con eso, pero un mensaje de advertencia de corte de línea lo distrajo, no podía. Aún si Tyler acudiera como Flash ahora mismo, tendría primero que enseñarle a trapear antes de pedirle que lo haga. Ya había inspeccionado el aula de periodismo que dejó a su cuidado, y aunque el piso estaba limpio, el polvo había cubierto los antiguo ordenadores, por los que tuvo que darle otra repasada. En vez de ayudar, Tyler había echado mas carga sobre sus hombros. 

Tyler, ¿qué estoy haciendo contigo?

¿Le habría dejado la piel demasiado marcada? Seguro que si. Incluso cuando se despidió, una pequeña marca empezaba a delimitar en la zona. Ahora mismo estaría cenando con sus padres, seguramente luego, si la madre era descuidada, la reprimenda llegaria cuando despida a su padre las buenas noches. Y mañana, quizás, se pase todo el día llorando en los brazos de su amiguito Ryan. Inocente de no saber la diferencia entre un beso y un simple agarre.

Pateó la otra cubeta, la cubeta vacía, y aunque fue un logro ignoro los motivos. ¿Había echo eso?

"¿Tyler eres homosexual?"

"Josh me lastimas"

"Por favor, Josh"

¿Habia que aprovecharse? ¡Claro! los heterosexuales siempre se aprovechan un poco.