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|Explicación de lo que pasó con Tyler el capitulo anterior|

—Siento llegar a ayudar solo el último día.

No podía decirle que no a Brendon, aún más cuando había sido tan grosero varios días con él ignorando sus invitaciones, retrocediendo pasos hasta perderlo en los pasillos y brindando falsas excusas. Ahora que caminaba junto a él escuchando en que podría ayudar a la escenografía, recordó lo inútil que había sido todo aquello, encapsularse en sus problemas no ayudó en nada como las visitas al medico que no lograron quitarle el dolor de cabeza ni las marcas en la piel que lo traían tan alarmado las ultimas semanas. Tyler pensaba, con mucha frecuencia, ser de esas personas dramáticas que terminan engrandeciendo problemas pequeños y que se ahogan en una gota de agua observando al cielo cuando algo los deprime. No quería ser así, no quería volver a sentirse tan solo. Finalmente tomó la mejor decisión ante su malestar, los médicos ni sus padres pudieron pero Josh, asegurando que todo iría bien, fue suficiente. Si aún estaba mal ya no lo sentía, sus escapadas a escondidas con Josh habían ayudado claro, y este pequeño paso cerraría el circulo, confiaba en ello. 

Encontrando a Brendon junto a él, descubrió que su función sería ingresar al compartimento que haría de establo en el show. Habían grandes cercos de madera en el podio, y aunque no pudiera creérselo del todo, ahí estaban, dos caballos comiendo muy relajados. 

  —Tienes brazos de niña —comentó Brendon, quien había estado explicándole su labor durante todo este tiempo —Es perfecto para ti.

Entendió que debía conectar ambos muros, ser rápido e incrustar un peldaño entre ambos. Lo hizo todo siguió las indicaciones, intento e intento, re ubico los cercos y volvió a intentar. Era ya incomodo tener la mirada de todos en su trabajo, pero lo fue más, oír que todos parecían querer decirle que hacer en ese momento. Fue humillante para sí mismo, acostumbrado él a dar las ordenes tener que recibirlas, pero se callo, no solía ser grosero con sus compañeros tampoco quería mandar al diablo a Brendon cuando realmente lo estaba alterando, no ayudaba el saber que Josh también lo miraba y él no hacia nada. Encogido, siguió intentado e intentando hasta que finalmente alguien lo interrumpió. 

— Es un juego de niños Tyler, deja ser tan bebé 

Conocía esa voz, y rehusándose a dirigir la palabra, lo cual había hecho muy bien durante los últimos días, siguió firme en su labor.

— Deja eso de una vez, estas retrazando a todos aquí

Se cansó de soportarla ¿No podía ella mantenerlo al margen de sus opiniones?

— No estoy molestando a nadie —dijo firme.

La rubia se burlo un poco, algunos curiosos se aproximaron.

— Tyler —tocó su hombro— Sino puedes hacerlo yo lo haré por ti.

Quiso negarse, pero, también pensó que era buena idea dejarla intentarlo para que ella descubriera por si misma su pesar, al fin de cuentas Jenna podía ser todo lo que él pensaba pero no dejaba de ser la chica que su madre había escogido para él, incluso antes de nacer. Creyó que le cerraría la boca pero no fue así, y de eso se arrepintió  de inmediato.

Jenna había roto el peldaño en dos pedazos más pequeños de un pisotón, unió los cercos sobre ellos, eran parejos y encajaron a la par quedando completamente sellados. 

— ¿Sorprendido? —preguntó con una sonrisa. Iría a sonar igual de prepotente como ella porque sabía como, era un juego de dos y lo conocía muy bien, pero antes de solo intentar justificarse la rubia siguió hablando. — Creó que no lo suficiente. Al menos no como estaba Zack hoy cuando lo dejé en tu habitación.

VOICE // JoshlerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora