☆☆The marvelous misadventures☆☆ [ChanSoo]

Sin superar

-¡AHH!- gritó con fuerza, logrando hacer que su acompañante saltara de su sillón.

-¡¿Qué pasa?!

-Es normal- dijo el hombre sentado frente a KyungSoo –Siempre gritan.

YiFan observó con escepticismo al sujeto que tenía cubiertas las manos con guantes estériles -¿Estás bien?

KyungSoo levantó los pulgares en el aire y mantuvo la boca abierta.

Faltaron un par de minutos antes de que el hombre terminara su trabajo, le dio claras indicaciones sobre el cuidado y mantenimiento y dejó libre al par.

Ahora YiFan y KyungSoo caminaban por las calles de la ciudad a la que se habían vuelto aficionados en visitar, buscaban un establecimiento de helados para poder acatar la primera orden del hombre; bajar la inflamación. No habían intercambiado palabra alguna desde que habían salido del estudio. El ambiente se sentía diferente.

Encontraron un lugar en el que podían comprar lo que necesitaban y sentados en una pequeña mesa afuera del comercio comenzaron una plática que no tenía nada de relevancia.

-¿Puedo preguntar algo?- dijo Kris sorbiendo la malteada que tenía frente a él.

-¿Qué?- preguntó KyungSoo sin despegar el pedazo de hielo de su lengua.

-¿Modificaras tu cuerpo cada vez que hables con ChanYeol? O... lo superarás sanamente...

KyungSoo observó con seriedad a su amigo y tras largos minutos de silencio, alejó la paleta de hielo de su boca para poder hablar.

-... puedo hacer lo que me plazca- se levantó de hombros –Si quiero hacerme un tatuaje o perforarme cada vez que hable con ChanYeol es asunto mío Kris, gracias.

-Pf... Como quieras- el mayor rodó los ojos y se recargó sobre el respaldo de su silla, de alguna manera se sentía frustrado –Es tu cuerpo- levantó uno de sus hombros y mantuvo su silencio al no obtener un respuesta grata por parte del menor.

-Exactamente.

El silencio volvió a reinar entre los dos, Kris bebió su malteada y KyungSoo espero a que la paleta se derritiera en su boca, haciendo que la hinchazón sobre su lengua no fuera tanta y para poder lograr entumecer aquel músculo a que no le doliera tanto al hablar. Suspiró pesadamente al sentirse incomodo en aquella situación.

-¿Podemos irnos?- preguntó el bajito girando su mirada hasta el mayor quien solo se limitó a asentir con la cabeza. En poco tiempo ambos se encontraban viajando de regreso al instituto de donde habían salido muy temprano en la mañana. KyuungSoo había citado a Kris casi con desesperación el día anterior, alegando que tenía un asunto muy urgente que atender, uno que debía cumplir en cuanto antes y YiFan como buen chico que espera conquistar a la persona que le gusta, hizo lo que el menor quería. Pero comenzaba a cansarle el hecho que sus salidas solo rondaran alrededor de una tercera persona, se sentía utilizado.

Y el camino de vuelta no fue en absoluto interesante. Los dos permanecieron en silencio, teniendo un montón de cosas diferentes en la cabeza, Kris pensando en porque KyungSoo a veces actuaba como si no pudiera dejar atrás el pasado, preguntándose entonces porque su cortejo había sido recibido con tanto gusto y KyungSoo pensando en que debía dejar de precipitarse tanto. Pero ambos coincidían en que por ese día había sido suficiente el tiempo que habían pasado juntos. Llegaron a la escuela justo antes de que el sol se ocultara, una despedida monótona y separaron caminos.

El menor caminaba a paso lento hasta su habitación, con la mirada fija en sus pies, dándole vueltas a lo que YiFan había mencionado sobre superar sanamente a una persona, recordaba el día anterior. Y la opresión en el pecho le seguía molestando, su corazón roto le ganaba al revoloteo en su estómago.