Punto de vista de ChanYeol.
Seguía profundamente dormido cuando la alarma de mi celular sonó, tenía tantas ganas de seguir durmiendo en aquella cómoda cama que parecía ser una esponjosa nube, suave y liviana, una que me llevaba cientos de metros arriba en los cielos, donde todos los problemas parecían pequeños al lado de la inmensidad del cielo...
Pero el insistente sonido de la alarma no me dejó seguir disfrutando de la comodidad de la cama, apagué el celular y me quedé sentado sobre el colchón con un rostro adormilado.
-¿Qué tenemos para hoy?- pregunté, sabía que YiXing estaría en alguna parte del cuarto alistándose para salir.
-Vaticano- respondió el chino, bostecé y me levanté perezosamente de la cama para ir hasta la ducha y terminar de despertar con un poco de agua tibia sobre el cuerpo.
Las gotas de agua se sentían tan bien sobre la piel, relajaban cada fibra muscular, aliviaban la incomodidad de la mañana e instauraban una increíble nueva energía.
KyungSoo había tenido razón, Italia es asombrosa.
YiXing y yo fuimos hasta la pequeña terraza del hotel donde el restaurante se erguía, nos reunimos con el resto de nuestros amigos y tomamos un agradable desayuno antes de poder partir a la emblemática ciudad-estado-país-milagroso. Los días pasados habían sido museos, un paseo a un viñedo, la noche de opera en el Coliseo, todo un viaje cultural y KyungSoo seguía insistiendo en seguramente amaríamos La Toscana, que deberíamos ir todos juntos a esa región. Las cosas que aprendemos de manera práctica no se comparan en lo absoluto en lo visto en los salones de clases.
-¿Me pasas la mantequilla?- preguntó SeHun.
-Eeeew esto es café americano- se quejó JunMyeon haciendo una mueca de asco luego de haber dado un sorbo a la taza frente a él.
-¿Cómo que no podemos tomar vino en el desayuno?- cuestionó JongDae indignado.
El estado de ánimo de todos había mejorado, luego del terrible suceso que azotó la escuela, las cosas iban mejorando lentamente, ya se veían menos caras alargadas y más sonrisas brillantes por aquí y por allá.
-¿Tenemos la tarde libre?
-Escuche que por ser nuestra última noche...- asintió Lisa.
La última noche en Italia... dejé de comer el pan con mantequilla e instintivamente dirigí la vista hasta el más bajito, KyungSoo se mantenía con esa peculiar expresión de indiferencia mientas seguía comiendo de su cereal, sonreí al ver como sus labios se abultaban al masticar. Siempre me pareció sumamente adorable a la hora de comer. Se percató entonces de que estaba observándolo y sin mover ni un solo músculo y más bien dirigiendo su vista hasta la mía comenzó a rascar la punta de su nariz... mi sonrisa se hizo más grande aun cuando me di cuenta que el pequeño diablillo me estaba levantando el dedo de en medio.
-¿Y qué hay de interesante en el Vaticano?- preguntó Kai desinteresando.
Todos volearon a verlo de manera asombrada, el desayuno continuó por un par de minutos antes de que los profesores nos alentaran a salir del hotel para tomar las camionetas y dirigirnos hasta el último lugar de nuestra excursión.
Aquella ciudad no tenía el impedimento de ser el lugar más diminuto del mundo pues albergaba siglos de historia y cultura. Habíamos visitado los lugares religiosos por mero enriquecimiento artístico, los profesores continuaban hablándonos de los renacentistas y el conflicto que existía entre ellos y la institución que ahora albergaba sus obras con recelo.
Mientras íbamos avanzando por la enorme capilla donde los frescos en el techo eran lo más atrayente me percaté de la solitaria imagen de KyungSoo frente a mí, veía las pinturas con interés pero algo en su aura indicaba que estaba muy lejos de Italia. Él y yo ya éramos amigos de nuevo, pero como odiaba que tuviera tanta razón... no era lo mismo.
ESTÁS LEYENDO
☆☆The marvelous misadventures☆☆ [ChanSoo]
Fiksi PenggemarEn un exclusivo internado, donde los hijos de los políticos más poderosos, herederos de monarquias, hijos de famosos internacionales y uno que otro talentoso becado conviven durante 24/7, las aventuras no se hacen esperar, con edades que oscilan ent...