MCP | La Residencia ©️ (Parte 1) (¡Completa!) ✓

Capítulo 82.

Capítulo 82.

Cuando Adrián y yo nos lavamos las manos, decidimos salir del baño con normalidad.

—Espera —tiró de mi mano y me hizo girar sobre mis pies.

Con veneración, estampó un dulce y sensual beso sobre mis labios. Su sabor a alcohol mezclado con menta me incitaba a continuar saboreando su boca con sumo deleite. Su respiración predominó sobre la mía al arrinconarme contra la puerta.

—Andy, estás muy intenso —sonreí sobre sus sensuales labios hinchados de tantos besos que nos habíamos regalado—. Creo que debería obligarte a venir a más citas como esta —me reí abiertamente y él hizo lo mismo.

Su mano derecha se posó sobre mi mejilla y acarició mi piel al mirarme con una especie de ternura.

—Esta es la mejor cita en parejas que he tenido —musitó.

—¿En serio? —apoyé mis manos sobre su cuello y acerqué mi boca hacia la suya.

—En serio —jugó con mi nariz—. Y si no salimos de aquí de una vez, alguien se hará encima.

Solté varias carcajadas, pero él se quedó embelesado al mirar cómo me divertía y me hacía reír.

—Gracias... —susurró.

—¿Por qué? —bufé, mirándolo a los ojos.

—Por no tenerme miedo —zanjó—. Y porque nunca has salido corriendo cuando se trata de mí.

—Jamás lo haría, Ojitos Bonitos.

Me mostró su perfecta dentadura al sonreír ampliamente. Parecía todo un ángel seductor.

—Aly, estoy muy emocionado.

—Y yo también, pero si no salimos de aquí, sé que tendrás razón y alguien se hará encima —me reí como una tonta junto a él.

Verlo tierno y dulce era todo un privilegio.

—Lo sé, pero escucha... —sujetó mi mandíbula con suavidad y me miró a los ojos—. Eres la mejor y única novia que he tenido. Estoy muy emocionado de que, tú, Alysha Nerea Doménech Losada, seas mía en todos los aspectos —plasmó besos juguetones sobre mi cuello y mi mejilla, causándome cosquillas—. Mi chica. Mi novia. Mi amor. Mi obsesión.

—Diablos, Wayne. Este duro polvo te ha puesto de buen humor.

—Y la chupada también, pero ese no es el tema ahora —se rio en mis narices, simulando una expresion de ofendido—. Trato de ser romántico. Pero como siempre, mi jovencita, tu lengua viperina no puede faltar.

Tocaron la puerta con insistencia y la abrimos de golpe. Algunos hombres se nos quedaron mirando, sabiendo lo que habíamos estado haciendo. Sin embargo, Adrián colocó su brazo sobre mis hombros al alzar la mirada.

Caminé junto a él apesar de que se me quedaron mirando de arriba hacia abajo. Para mis adentros, supuse que Adrián se estaba jactando al sentirse como el macho alfa.

Cuando él y yo comenzamos a bailar entre el bullicio, me apoyé de su cuello y acerqué mi boca hacia su oído como pude.

—Eres bastante desarmado —me reí—. Te da igual que se enteren que hemos estado teniendo sexo en un baño público.

—Corrección —inquirió a través de la música—. Me gusta que se enteren que la sexy chica que han estado comiéndose con la mirada desde que llegamos, le han estado dando duro gracias a su hombre.

—Eres como un niño.

Me puso los ojos en blanco, pero sujeté sus mejillas e hice que me mirara a los ojos.

—Mi... niño... —moví mis labios y entendió mi referencia.

Sin embargo, su respuesta fue inesperada.

—Tuyo, mi amor —su frente se adhirió contra la mía—. Siempre he sido tuyo.

🔹

—Gracias nuevamente, doctor Wayne —Leslie volvió a agradecerle al salvarla del aprieto en que se había encontrado junto a Jimmy—. No tengo cómo pagárselo.

Adrián le estrechó la mano y la agitó con calidez cuando ella dejó de abrazarlo.

—De hecho, sí hay una forma de pagar el pequeño percance —le dijo al alzar la mirada—. Debes tener mano dura con ese maltratante si vuelve a salir de la cárcel. No le des el gusto y mucho menos le agarres pena. Págame de esa manera.

Jimmy y ella lo miraban con atención. Nos habíamos ubicado frente a la casa de mis padres, justo al lado del Lexus último modelo de Adrián. Apesar de que estábamos pasados de tragos, mi novio fue muy cuidadoso y responsable al manejar.

Como Adrián le ordenó a Jimmy, Frankie había enviado a varios agentes con una orden de arresto, llevándose al exnovio de Leslie al hospital para luego sumarle cargos por hostigamiento y un par de detalles más que no logré entender.

Sin embargo, cuando Adrián habló con los agentes, pareció llevarse muy bien con ellos. Y fue evidente que se conocían de algún lado o por Frankie. Tuvo razón cuando había mencionado que también tenía sus conexiones.

—¿No tengo al mejor novio del mundo? —comenté con orgullo y acaparé su brazo derecho, sujetando su mano con encanto.

—Ahora —bufó—. Antes no.

—Su lógica es sincera —mi hermano le siguió el juego, pero yo rodé los ojos.

—Jódete, Wayne... —me crucé de brazos sonrojada.

Sin embargo, él me ignoró y me elevó en sus brazos de sopetón, colocándome sobre su hombro. Leslie pareció sorprendida por su exagerada acción, pero Jimmy reía al divertirse de mi situación.

—¡Bájame, Andy! —azoté su prieto culo una y otra vez con ambas manos—. ¡Bájame!

—¿Qué te baje? Eso no me dijiste cuando te elevé y te di duro contra la puerta del baño en el Soul Angel —soltó varias y sonoras carcajadas.

—¡No tienes límites! ¡Bájame, coño! ¡No te lo voy a volver a decir! —le advertí.

—Entonces, no lo hagas. Así no perderás el tiempo —caminó conmigo en su hombro y rodeó su vehículo, llevándome hasta la puerta del copiloto—. A mí nadie me manda ni me amenaza. ¿Lo entiendes? —me metió en el interior del Lexus.

Jimmy y Leslie nos habían seguido. Reían a sus espaldas.

—¿Y qué han aprendido en esta cita, chicas? —preguntó mi hermano con diversión.

—¿Qué hay que tener más cuidado a la hora de escoger nuestras parejas? —Leslie comentó, refiriéndose al percance de Jesse y de su exnovio.

Jimmy se quedó pensativo por unos instantes, pero después prosiguió con su discurso.

—Yo iba a decir que aprendieron a tener hombres de verdad. Novios como nosotros, con el orgullo aquí —se tocó el pecho como si fuese un macho alfa.

—Yo iba a decir algo similar —susurró Adrián fríamente al mirarme desde el exterior como el manipulador que era—, pero ya qué —cerró la puerta en mis narices.

«Nere, esto será muy divertido», pensé.