Capítulo 22.

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Capítulo 22

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Capítulo 22.

(Adrián).

«Esta mierda no podía estar pasando. No con ella. Con mi Aly no».

Alysha también capta la atención de Amanda y Jesse cuando ambos se percatan que mis ojos estaban fijos en ella, quien intentaba estudiar todo lo que estaba ocurriendo. Sin embargo, yo estaba malditamente descolocado con su presencia aquí.

—Nere, ¿¡qué haces aquí!? —Jesse se queda estupefacto al verla. Se gira, con la intención de caminar hacia ella.

Sentía como mi corazón latía muy deprisa. Un nudo en la garganta se apoderaba de mí al pensar que podría sucederle algo malo a lo más preciado de mi vida.

—Vengo por lo que es mío —espeta sin preámbulos, siendo descarada—. Por él... —me señala con un dedo al mirarme furiosa—. Así que apártate de mi camino, Jesse.

«Definitivamente, el alcohol estaba haciendo lo suyo en ella. No había vuelta hacia atrás».

Parpadeo muchas veces como un idiota mientras percibo como Amanda y Jesse no pueden evitar impresionarse.

—Yo... —por alguna estúpida razón, a pesar de la situación en la que nos encontrábamos, me ruborizo—. Vuelve a la fiesta —intento parecer cortante y frío—. Estoy ocupado como para atenderte en este momento.

Solo quiero que salga de aquí lo antes posible. Quiero que permanezca fuera de peligro.

—No... —Amanda vuelve a abalanzarse sobre mi cuerpo, lo que causa que suspire con exasperación.

—¿¡Cómo te atreves a tener el descaro de venir aquí por mi amigo, cuándo es conmigo con quién deberías hablar!?

—Quítale las manos de encima —Alysha masculla al ignorar a Jesse por completo.

Vuelvo a darme cuenta de lo que Amanda está haciendo y me aparto sin disimular, queriendo que mi niña se diera cuenta de que realmente respeto su espacio.

De repente, Alysha continúa con su paso, mientras que Jesse, Amanda, y yo nos quedamos en silencio, sin palabras. Me estaba sintiendo como un pendejo con esta muchachita que siempre me hace sentir tan perdido en diferentes situaciones.

—¿A qué viniste? ¿Qué haces aquí? —esta vez, soy yo el que insisto al preguntarle con los ojos engrandecido.

Ella, sin embargo, también ignora mis palabras. Solo logro que arrugue la nariz con esa expresión tan suya que siempre la caracteriza.

«¿Qué carajo está haciendo?»

Sujeta mi mano con ímpetu y tira de ella, haciendo que me dirija hacia su dirección.

—Tú traerás tu prieto culo de vuelta a la fiesta —gruñe, sin importarle que Jesse y Amanda estuviesen presentes—. Me voy por unos minutos y tengo que encontrarte con estas lacras.

MCP | La Residencia ©️ (Parte 1) (¡Completa!) ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora