Un Enredado Amor (Josh Hutcherson) Editando

CAPÍTULO 94

No había dormido toda la noche. Mi mente iba y regresaba a un mismo punto. Josh.

No podía sacarlo de mí. No podía dejar de pensar en él como algo mas que amigo. No podía quitarme la sensación de sus labios y sus caricias de mi piel. No podía apartarlo.

Me levanté al mismo tiempo que mi novio. Él y mis amigos partían hacia nuestra tierra a pasar las fiestas. Yo había prometido quedarme con Peter en la casa de Aspen y mi vuelo salía mas tarde asi que aun tenía tiempo de empacar.

Me despedí de los chicos. Realmente los iba a extrañar pero no podía dejar a mi hermano solo. Hice mis maletas y partí hacia el aeropuerto. Creo que me quede dormida un par de veces en la sala de espera. La mala noche me pasaba factura.

Apenas mi cabeza tocó el asiento me sumí en un sueño profundo. Cuando despertaba, todo en mí se sentía tan cómodo y relajado como hace mucho no había sucedido. Para ser mas específica, eso solía suceder cuando dormía con Josh.

Cuando abrí los ojos me encontré con un rostro conocido que oslo me hizo aferrarme a él por unos segundos mas hasta que el conocimiento llegué a mi y me de cuenta que esto no debería estar pasando. Me aperté rapidamente de sus brazos. Estaba furiosa. Él no debería estar aquí.

Abrió sus ojos sorprendido. – ¿Qué mierda haces aquí?

— Hola – dijo frotándose los ojos. – Alguien despertó de mal humor.

—Estoy a un segundo de golpearte y gritar. – en serio lo haría.

—No entiendo porqué. – dijo haciendose el desentendido.

—¿No vas a responderme?

—Si hablas del hecho que ambos coincidieramos en el mismo vuelo no dejaré que me eches la culpa. Yo solo abordé y te vi. Negocié con tu vecino de asiento para cambiar de lugar. Pensé que te alegraría viajar con un amigo.

—Algo me dice que no te crea. – esa sonrisa en su rostro no me daba confianza.

—¿En qué soñabas?

—No cambies de tema, Josh. Algo aquí huele muy mal.

—Te juro que me bañe. Vamos, Alex. Tu mejor que nadie sabe que las casualidades existen. Ademas yo no sabía que vendrías a Aspen. Según yo, tu viajabas con tus amigos.Iría con mi familia, pero ellos viajaron donde mis abuelos. Aspen es un muy buen lugar para vacacionar. ¿No me dirás que soñabas?

Aun no confiaba en él pero tenía un punto. Nadie mas que mis amigos, Peter y mi familia sabian de este viaje. Decidí relajarme por un momento. —No lo recuerdo.

—Dijiste mi nombre. – aseguró sonriendo. En algun momento sus manos habían llegado a parar en mi cintura provocando un creciente calor en mi cuerpo.

— ¿De verdad? Espera ya recuerdo. Tuve un sueño realmente estupendo.

— ¿Ah, sí? – preguntó acercandose a mí. Con su mirada fija en mis labios. Si seguía acercandose de esa manera volveremos a caer en nuestro círculo vicioso.

—Sí, ha sido el mejor funeral al que he asistido.

Empezó a reir contra mi cuello. Su aliento hacía que me estremezca. Tenía que apartarse pronto. Ya sabía que yo no podái hacerlo.

—No creo que soñaras con mi funeral. —Digo en voz baja. —En realidad creo que tenías un sueño erótico conmigo.

Ahora yo reía —Estás loco. Lo último que soñaría es a nosotros en esa situación.

Y para invalidar mi punto, Josh dio un mordisco en mi cuello haciendome gemir. Es obvio que nosotros en esa situación es exactamente lo que mi cuerpo pide.