El sociópata y yo

Caso 12: El detective mentiroso. Capítulo 10: El último adiós

Había pasado algunos días desde que Sherlock había salido del hospital. John y Sherlock se encontraban en sus respectivos sillones, mientras que Alline se encontraba en la silla que usaban, cada vez que un cliente llegaba a ellos. Escuchaba cada una de las palabras que salían de la boca de Sherlock.

-      Tenía varios planes alternativos- continuaba explicando Sherlock-. El problema es que no recuerdo cuales eran. Y, por supuesto, no había previsto que iba a alucinar con que conocería a su hija. Aun me inquieta lo de la hija. Parecía muy real. Me dio información que no pude obtener de otro modo.

-      Pero ella nunca estuvo aquí- comento confundida Alline-. La hubiera recordado.

-      Interesante, ¿no? Mi teoría es que, si se me ligaba el flujo de datos del mundo simultáneamente, sería posible prever y deducir casi todo.

-      ¿Soñaste con una mujer mágica que te dijo cosas que no sabías?- preguntó John esta vez.

-      Quizá las drogas abrieron algunas puertas de mi mente. Estoy intrigado.

-      Nosotros también, Sherlock- comento la chica.

-      Por eso hacemos turnos para alejarte de las golosinas- comento John haciendo sonreír a Alline.

-      Creí que pasábamos el rato.

-      Molly estará aquí dentro de 20 minutos- comento John viendo el reloj.

-      Puedo con él por 20 minutos- comento divertida Alline.

-      Sí, estas segura.

-      Tengo a la mejor esposa- la chica se le quedo viendo por unos instantes-. Me alegra, una vez más, que Mycroft se haya equivocado sobre Allina al dejarme cuando tuviera la primera oportunidad.

Hubo un silencio entre los tres. John dejo su taza encima de la mesa mientras se preparaba para irse. Alline miró a Sherlock, que le hizo una señal para hablar ese asunto pendiente que tenían entre los tres.

-      Lo siento, es por Rosie. Quede con Marian de que la recogería hoy.

-      Sí, claro, Rosie- Sherlock recordó a su ahijada en el instante que John lo mencionó.

-      ¿Estarán bien por 20 minutos?- Alline sonrió al verlo.

-      Sí, perdón. No había pensado en Rosie- se dirigió a Alline-. Tampoco en los nuestros. ¿Dónde están?

-      William y Michelle están abajo con la señora Hudson. Y Scottie está tomando una siesta.

-      Sí, por supuesto. Se me olvido que pasaron el mes entero en la casa de tu hermana. No la molestarías más.

-      No pasa nada- dijo John.

-      Iremos pronto a verla, a Rosie- comento Sherlock.

-      Sí.

Alline se le quedo viendo a Sherlock por unos segundos haciendo que rodará los ojos. Los dos habían evitado hablar sobre lo mucho que les había afectado la muerte de Mary.

-      No creo que admita las grabaciones- fue lo primero que dijo Sherlock haciendo que Alline pusiera su mano en su cara.

-      Perdón, ¿qué?

-      Técnicamente es instigación. Las rechazarán. Aunque poco importa, porque parece que no puede para de confesar.

-      Eso es bueno.

-      Sí.

John se encontraba dispuesto a irse nuevamente. Alline se levantó de su lugar dispuesta a recoger la taza que había dejado John. Se acercó a Sherlock lentamente.