Minutos más tarde, los tres se encontraban preparando para poder celebrar el cumpleaños de Sherlock. Will y Michelle habían corrido en dirección a su padre para poder darle los dos dibujos que habían hecho para él. Sherlock los envió por algo de que taparse.
Alline había subido para cargar a Scott y llevarlos con ellos a donde fuera que fuesen a celebrar. La chica sonrió al ver que su pequeño le daba una sonrisa cuando la acercó a su pecho. Para cargarlo entre sus brazos.
- Hemos quedado con Molly y Marian en una pastelería- comento John viendo a ambos mientras salían a la calle con sus hijos-. Es tu cumpleaños. El pastel es obligatorio.
- Una gran dosis de azúcar es un sustito- comento poco animado.
- Sherlock Holmes, que tus hijos no te escuchen, o en serio estarás en problemas- comento Alline bajando las escaleras-. Así que compórtate.
- Haz caso de Alline y compórtate- replicó John.
- No me corresponde decirlo a mí, pero solo fueron mensajes. Solo que a ella nunca le respondería. Solo una vez estuve con ella y fue cuando estuve en mis dos años de ausencia. Ella sabe que el día que le conteste, es porque Alline me falló- la chica solo sonrió al verlo-. Se que nunca lo harás- Sherlock le dio un beso en la frente.
- William, Michelle. Si no se apurán los dejaremos sin pastel- comento la chica desde el descanso.
- No es una idea agradable, John- empezó a decir Sherlock-. Pero, a veces, tengo la terrible sensación de que quizás todos seamos humanos.
- Incluso tú- respondió John.
- No. Incluso tú.
- ¿Pastel?
- Pastel.
Escucharon las pisadas de Will y Michelle bajar rápidamente las escaleras con un paquete mal envuelto en sus manos. Los dos fueron abrazar a Sherlock, quien se encontraba un poco sorprendido por la reacción de su hijo.
- Mamá dijo que te gusta usar bufandas- comento Michelle emocionada.
- Y también dijo que hoy es tu cumpleaños- continuo Will.
- Así que decidimos darte este regalo.
Los dos pequeños extendieron el paquete a Sherlock. El detective agarró el paquete y lo empezó a desenvolver rápidamente. En la cara de los niños se asomaba una emoción eminente. Sherlock abrió la caja para darse cuenta que se encontraba una bufanda de color como usaba en los primero casos, solo que tenía agregados un M, W y S.
- Los niños les gusto ese color y quería que fuera diferente a las demás. ¿Te gusto?
- Por supuesto que le gusto mamá- comento William dejando sorprendidos a los tres adultos que se encontraban ahí-. Esa sonrisa solo lo muestra cada que le gusta algo, completamente diferente a los demás.
- Solo falta- algo dijo Sherlock regresando el piso.
Sherlock empezó a buscar entre las cosas de su escritorio algo importante. Alline sonrió al darse cuenta que era el gorro que lo había lanzado a la fama en los diferentes medios de comunicación. Tanto Will como Michelle empezaron aplaudir.
- ¿En serio?- pregunto John incrédulo.
- Soy Sherlock Holmes, llevó el maldito gorro- Michelle corrió hacia sus brazos para que lo cargará-. ¿No es así, Mary?
- Papá, soy Michelle- respondió ofendida la pequeña.
- Vamos William. No hay tiempo que perder.
La familia Holmes bajo al primer piso, dejando a John completamente solo viendo el interior de la casa.
(Nota de la autora:
Les diré que el próximo sábado subiré capítulo. ¿El motivo? Se los diré ese día. Espero que les haya gustado el capitulo)
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El sociópata y yo
FanfictionLa vida de Alline Smith cambio radicalmente desde el día que llegó a Baker Street, ella es detctive en Scotland Yard, siendo una de las mejores pero siempre tiene de sombra a su vecino de abajo Sherlock Holmes. Su vida es tan normal como cualquier p...