Capítulo 47

3K 288 73
                                    

El momento había llegado, Alcina tenía bastante claro lo que hacer respecto a Miranda. Iba a hablar con ella e incluso verse en persona de ser necesario. Tenía que hacerlo tal y como Elizabeth la había dicho aunque eso incluía no hacer nada contra Miranda. No buscaban una guerra sino una solución.

-¿Irás a hablar ahora?-preguntó la menor siguiéndola hasta sus aposentos.

-En efecto. Será rápido, no creo aguantar mucho una llamada con ella.

Con que me de tiempo a terminar eso.

La vampira miró de reojo a la menor, algo no estaba bien con ella.

-¿Pasa algo querida?-tomó su mentón mirándola a los ojos.

-No es nada.-sonrió posando su mano con la de ella-. Ve, no la hagas esperar más.

¿Qué estas ocultando?

Tan pronto como Elizabeth vio la esbelta figura de Alcina desaparecer por los pasillos corrió hasta la sala común y pegó un silbido llamando así a las niñas.

-Ya pensabamos que no lo ibas a conseguir.-habló Bela.

-Vuestra madre es algo difícil.-bromeó acercándose a ella-. ¿Esta todo listo?

-Casi casi.-comentó Daniela-. Solo nos falta la música de ambiente y las velas. Vas a impresionar mucho a madre.

-Es lo que quiero. Hoy... Hoy hacemos un año.-susurró para si incapaz de borrar la sonrisa de su rostro. Las chicas la miraron emocionadas.

-¡No pierdas el tiempo, vamos!-la empujó Cassandra hacia el jardín mientras les lanzaba una mirada rápida a sus hermanas.

-¡Espera! ¡Cass!-salió sin más remedio de allí mientras Bela y Daniela reían.

-¿No te parece divertido que las dos esten organizando algo y ni lo sepan?-rió la menor mientras caminaban hacia una sala que hacía mucho que no usaban.

Al ver como estaba el lugar ambas se quedaron mirándose unos minutos.

-¿Sirvientas?

-Sirvientas.-afirmó la mayor-. Yo no pienso limpiar todo eso.-señaló la polvorienta sala.

-Hay que ayudar si queremos que este lista para esta noche.

***

Alcina suspiró tratando de guardar la compostura. Miranda iba a ir, se iba a presentar en persona para discutir sobre ello y las ganas que tenía eran pocas. Más sabiendo el día que era.

Tengo que encontrar a Elizabeth. Quiero mantenerla a mi lado antes de que Madre Miranda intentara algo.

Mientras pensaba en ello pudo darse cuenta de que Cassandra corría de un lado a otro.

-¿Cassandra?-la joven paró en seco mirando a su madre.

-¡Madre! Creí que estabas ocupada.-dijo ocultando su nerviosismo.

-Estaba pero ya he acabado.-se cruzó de brazos y dejó escapar una pequeña sonrisa-. ¿Qué se supone que haces corriendo de un lugar a otro?

-¡Nada!

-Cassandra.-la advirtió sin quitar su sonrisa.

-¡Esta bien!-se acercó a ella y esperó a que se agachara para susurrarla-. Distraigo a Eli, esta caminando de un lado a otro y no quiero que se entere de lo que tienes preparado.

Eres mi único pensamientoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora