UNA PROPUESTA INMORAL

Capítulo 21: Más que un espectáculo

"Conversación WhatsApp"

DUSTIN
Estoy flipando

Las puertas se abren en 2

¿Dónde estás?

"Fin de la conversación"

ANGELA

Vi que mi teléfono se iluminaba con nuevos mensajes y corrí hacia el escritorio, donde yacía encima. Sabía que se me hacía tarde, lo que no era habitual en mí.

Pero después del estrés de la conversación con Xavier en su despacho, necesitaba algo que me relajara, así que me había dado un baño caliente, tratando de exfoliar mi ansiedad.

Me apresuré a ponerme el vestidito negro que había comprado con Dustin, lo único que encontré en la tienda. Era hermoso en su sencillez, una falda clásica de línea A con un top ajustado y un escote conservador.

Entonces me puse un par de zapatillas de ballet y salí corriendo del ático, encontrando por suerte un taxi justo fuera.

Me había olvidado de pedir un chofer cuando estaba arriba y no tenía tiempo de coger el metro, así que opté por el taxi.

Cuando llegué al Soho 149, llevaba quince minutos de retraso. Pero cuando miré a través de los escaparates del suelo al techo, mi sentimiento de culpa se disipó. El local estaba lleno.

Pagué al taxista y me bajé, acercándome al guardia de seguridad que estaba junto a la puerta. Era una bonita tarde de otoño, y el cielo nocturno creaba el telón de fondo perfecto para la fiesta bien iluminada que se celebraba en el interior.

—¡Hola! Soy una amiga de Dustin —exclamé. El guardia de seguridad se limitó a mirarme, sosteniendo su portapapeles.

—¿Nombre?

—Angela. Angela Knight. —Se apartó inmediatamente, abriendo la puerta para mí. Tan pronto como atravesé la puerta, me golpeó el calor de una habitación llena de gente.

Gente bien vestida y de aspecto interesante se movia por la galería, con vasos de vino en la mano y riendo entre ellos. Los cuadros colgaban de las paredes, y los distintos grupos de personas se colocaban delante de cada uno, señalando y apreciando el arte.

Mi corazón se disparó. No podía creer que lo hubiéramos logrado. Él lo había logrado. Estaba tan feliz por él, tan orgullosa.

—¡Angela! Por aquí. —Oí la voz de Dustin desde el otro lado de la galería. Me giré y lo encontré, vestido con una americana verde militar y unos pantalones negros brillantes, junto a la barra de la esquina. Estaba hablando con un hombre mayor con gafas. Me acerqué a ellos.

—¡Hola! —exclamé, besando su mejilla-. ¡Esto es increíble!

—¡Lo sé, lo veo! —añadió, claramente mareado—. Angela, este es el Sr. Sorento. Sr. Sorento, le presento a Angela Knight.

—Hola —dije, estrechando la mano del Sr. Sorento.

—Encantado de conocerte.

—El Sr. Sorento es el gerente del Garage en Tribeca.

—¿Oh? —dije, tratando de mostrarme sorprendida omitiendo el hecho de que no tenía ni idea de qué era eso. De repente, una elegante mujer con chaqueta de cuero y pintalabios coral apareció detrás de Dustin.