UNA PROPUESTA INMORAL

Capítulo 53: Pasado y presente

"Conversación WhatsApp "

PAPÁ
Xavier, ¿qué pasa?

Ron acaba de informarme
que el contrato de París está
cancelado.

Son meses de trabajo que se
esfuman.

Nos vemos en la oficina a las 6
de la mañana para discutirlo.

Para dejar las cosas más
claras, es una reunión
OBLIGATORIA.

"Fin de la conversación"

XAVIER

—Buenos días, jefe —saludó Ron al pasar por delante de su mesa al día siguiente. Todavía estaba oscuro, apenas era de día, y la oficina estaba vacía.

Feliz puto lunes para mí.

—Gracias por el café —respondí, cogiendo la taza humeante de su mano—. ¿Ya está dentro?

—Ya lo creo. ¿Necesitas que tome notas? —preguntó Ron, siempre ansioso.

—No. Necesito que reúnas a todos los del proyecto de París. Hablaré con ellos a las ocho en punto.

No esperé la respuesta de Ron, simplemente empujé la puerta de mi despacho. Papá estaba de pie en medio de la habitación.

Se suponía que estaba semiretirado, sea lo que sea que signifique eso, pero tenía la costumbre de presentarse en mi oficina como si todavía fuera el dueño del lugar. Supongo que debería estar agradecido de que estuviera tan contento de "ayudar", pero la mayor parte del tiempo, sólo me cabreaba.

—Papá... —empecé, sólo para que me cortara.

—No me interesan tus excusas, hijo.

Me dejé caer en la silla y me froté la sien, sintiendo que me empezaba a venir migraña. No tenía tiempo para una conferencia esta mañana. No había dormido lo suficiente para soportarlo.

—Has metido la pata hasta el fondo —continuó papá, paseándose frente a mi escritorio. Siempre se movía cuando se enfadaba, como si el problema fuera una especie de tigre u oso al que pudiera espantar haciéndose más grande.

Lo único era que había estado en el extremo receptor de sus gestos y de sus gritos demasiadas veces para asustarme.

—No podía creérmelo cuando me enteré de que habías rescindido nuestro contrato con Jacques anoche. Mi hijo, mi nuevo hijo no hace ese tipo de cosas. Eso es lo que hacía el viejo Xavier irresponsable, piloto de carreras y derrochador de dinero. No el Xavier al que le confié Knight Enterprises.

Tomé un sorbo de café y lo intenté de nuevo. —Papá, yo...

Papá se cruzó de brazos. —¿Cómo pudiste sabotear el proyecto de esa manera, Xavier? Son meses de trabajo que se han esfumado por la ventana. Tardaremos semanas en volver a poner las cosas en marcha, en encontrar otro socio.

Cansado de la agresión verbal de mi viejo, apreté los dientes y grité por encima de él. —¡¡¡JACQUES INTENTÓ VIOLAR A Angela!!!

A papá se le cayó la cara al suelo al instante. Luego se dejó caer en una de las sillas de invitados en el lado opuesto del escritorio. —¿Qué?