Pov. Katniss
Quiero estar enojada con Peeta. Realmente lo hago, pero es difícil estar enojada con alguien cuando estás reproduciendo sus palabras en tu cabeza y tienen sentido. Eso y el hecho que cuando le frunzo el ceño sus ojos me sonríen como si nunca hubiera estado enojado conmigo en primer lugar. Sé que está enojado. Es la primera vez que veo a Peeta enojado y lo está conmigo por lo que hice.
Él tenía razón por supuesto. Probablemente no debí haberme ido contra Helen como lo hice. Pero esa es la Katniss que mantengo bien atada, la cual se había soltado, y se mostró en toda su infame gloria. No he sido esa persona en mucho tiempo no estaba segura que ella todavía existía. No creo que a Peeta le haya gustado lo que vio. Me miro muy decepcionado. Es la única forma en la que podría describirlo, pero para el siguiente día ya había desaparecido esa mirada, como si nunca hubiera ocurrido. Pearce podía mantener el resentimiento tanto tiempo como yo. Y nuestras peleas no terminaban fácilmente, la mayoría del tiempo terminaba con sexo salvaje.
Pero creo que esa no es una posibilidad para Peeta y para mí.
Ahora me siento mal. Realmente arruine una oportunidad que tenía Peeta para poder hablar con Helen y Dexter. No quiero saber nada de ninguno de ellos. No confío en ellos y pasará un largo tiempo hasta que pueda perdonarlos. Pero Peeta, sé que quiere toda la información que pueda obtener. No me puedo imaginar viendo las piezas del rompecabezas que es su vida. Eso es lo que me hizo tragarme el resentimiento y disculparme con Helen.
Ella rápidamente aceptó, supongo que al ser psiquiatra entiende por qué lo hice.
Dexter por el contrario parece que quiere que me echen a la calle.
Ella accedió a reunirse conmigo, en mi casa. No creo que vaya a ser bienvenida en la de ellos por un rato, pero no planeo hacer visitas sociales por un tiempo. Le pedí disculpas, pero no me arrepiento en lo más mínimo de lo que hice. Solo lamento haber interferido con lo que Peeta quería obtener. Estoy dirigiéndome de vuelta a Chicago, ella se va encontrar conmigo mañana por la tarde. Dice que cree que sería bueno para nosotras hablar. Que tiene mucho que decirme y que necesito escuchar. No quiero saber nada de ella, solo iré y me sentaré hasta que esté de acuerdo en decirle a Peeta lo que necesita saber y obtener de Dexter lo mismo.
La señora Mellark se alegró de obtener un tiempo extra con Willow ya que pronto regresaremos a Chicago. Peeta y yo no hemos tenido la oportunidad de hablar sobre buscar una casa aquí. Todo estaba moviéndose demasiado rápido por mi parte y volver a casa me hizo darme cuenta de lo mucho que amo la ciudad y lo que la extrañé. Ajusto mi bolso en mi hombro mientras camino hacia mi auto. Levanto la mirada y veo a Peeta estacionando su camioneta. Dejo escapar una respiración profunda cuando se acerca.
—Hola —me saluda con una pequeña sonrisa—. ¿Por qué la bolsa?
—Regreso a Chicago, hay unas cosas que necesito hacer y no pensé que fuera mala idea llevarme algunas cosas conmigo. Regreso mañana en la noche —respondo.
—¿Conduciendo sola, son casi las siete de la noche? —Parece molesto.
—En el Audi voy a llegar antes de la medianoche. He conducido de esta manera cientos de veces a casa de mi tía —le aseguro. Hay una ligera brisa que sopla a nuestro alrededor cuando huelo el perfume caro y sé que él ha estado con Delly, y de repente siento que esta conversación es una pérdida de mi tiempo—. Nos vemos, Peeta —digo entrando en mi auto dejándolo de pie ahí afuera. Pongo la llave en el contacto y él toca en la ventana.
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Pedazos
Romance¿El amor lo puede todo? ¿Realmente se conoce a la persona con quien vivimos y amamos?