Capítulos Sin censura: Mi Infierno... en el Infierno

Capitulo 23

Fiorella:

(Escuchen- Voxifera, Era)

Abría mis ojos que estaban demasiado pesados, los abría y cerraba viendo todo negro, movía mi cabeza sintiendo que estaba cubierta mi cara.

Fiorella: Loretoo…. Deanii.

Loretto: Aquí estoy.

Deani: No veo nada.

- Aaaahhhhhh.
- Aaaaayyyyy.
- AHHHHHH..
- NO NO NO.
- POR FAVOR NO NOS HAGAN DAÑO.

Tragué saliva al escuchar las voces que se podían escuchar, no cerca, pero se lograban escuchar que no la estaban pasando nada bien. Removía mis manos necesitaba liberarme de mi amarre, la cuerda se iba suavizando poco a poco.

Fiorella: Ya me voy a liberar.

Loretto: yo igual.

Deani: aaay, yo no.

Mi respiración se entrecortaba al saber que había metido a Deani en serios problemas con estos hombres que parecían no tener misericordia ni piedad. Papá nunca me lo perdonará y menos tío Daemon.

- Aaaahhhhhh.
- Aaaaayyyyy.
- AHHHHHH..
- NO NO NO.
- POR FAVOR NO NOS HAGAN DAÑO.

Sonreí al sentir que mis manos se habían liberado, quité mi capucha, bajando hacia el amarre de mis pies, estaba muy bien atada la cuerda, miré hacia un lado viendo a Deani y Loretto que igual ya se había liberado, pero mi atención estaba en tres hombres que estaban parados reposando su cuerpo en la pared con brazos y piernas cruzadas. Loretto se quedó sin moverse.

Hombre 1: ¿sabes lo que nos pagarían por tener a las hijas de dos de los hombres más peligrosos?

Hombre 2: Padres asesinos.

Deani: Mi papá no es asesino, solo mata a los malos.

Solté mis pies levantando lentamente. Loretto estaba libre dando pasos hacia atrás, pero Deani estaba muy cerca de esos hombres.

Deani: Loretto, Fiorella… ¿Ya se soltaron?

Uno de los hombres se acercó hacia Deani, rosaba su rostro con el de ella pero agradecía que el miserable traía un pasamontañas que no le dejara ninguna sensación a mi hermana menor.

Deani: hueles feo.

Hombre 1: Huelo a muerte pequeña.

Fiorella: No seas cobarde, da la cara maldito cerdo.

Loretto: No saben en lo que se han metido… donde nuestros padres sepan donde estamos y que nos tienen secuestradas, serán la mejor medicina para alimentarlos.

Hombre 2: que estúpidas son… sus padres, tienen otros asuntos, tanto que las hace dormidas en casa, pero no. Prefirieron escapar de casa.

Hombre 3: decisión que nosotros hemos aprovechado.

Uno de los hombres acercaba su mano hacia sus brazos de Deani… deslizaba sus dedos sobre ella.

Fiorella: MALDITO NO LA TOQUES.

Deani: No, no me toques, te voy acusar a mi papá.

Hombre 3: tu padre está tan lejos.

Me sentía desesperada al ver que sus manos iban pasando sobre el cabello de Deani, ella con trabajo y llegaba al piso.

Fiorella- Loretto: NOOOO LA TOOOQUESSSS

Deani: Fiorellaaaa, Fiorellaaaaa, Fiorellaaa… dejameeee, maloooo, dejameeee…

Loretto y yo corrimos hacia ese hombre los dos hombres sostuvieron a Loretto, pero logré esquivarlos llegando hasta ese maldito que tocaba a mi hermanita, lo empujé con gran fuerza, dio varios pasos hacia atrás, la sostuve de su cuerpecito, pero pesaba demasiado cayendo las dos al piso.