Renata:
Respiré profundamente, tratando de ordenar toda la información que ya tenía en mi conocimiento, negué con la cabeza en solo pensar como sería la manera en que se le haría saber a Dimitri, quiero pensar que eso tendrían que ser a través de Daemon o Santino.
Dejé caer mi espalda en el respaldo del asiento, miraba los documentos, las fotos todo lo que ya tenía. Era un completo rompecabezas que sin una pieza fundamental me estaba costando mucho trabajo.
Levanté la mirada al ver a Gerard que venía corriendo desesperadamente, la veía algo asustado, me puse de pie entreabriendo los labios, la puerta se abrió… tragué saliva al ver esa mirada que no podía interpretar.
Gerard: Bastian.
Renata: Que.. ¿Qué tiene Bastian?
Gerard: Ha despertado.
Dejé todo lo que estaba haciendo saliendo corriendo de mi oficina, hasta los demás se pusieron de pie tratando de averiguar, pero no estaba para responder sus preguntas, necesitaba llegar donde estaba Bastian. Mi corazón estaba por salirse, miraba por todas partes, Siena no había llegado aun o si lo había hecho no la había visto… empujé la puerta viendo a Mónica que sostenía a Bastian de los hombros tratando de calmarlo.
Mis ojos se llenaron de lagrimas de felicidad al ver que por fin tenía de vuelta a esa pieza que era importante para mi. Estaba desesperado queriendo quitarse el respirador que lo estaba ahogando.
Bastian: mmmm, ammmm jjjmmm.
Renata: Bastian, Mi amor tranquilo.
Gerard y Monica no sabían que hacer…
Renata: BUSQUEN A SIENA, TRAIGANLA.
Gerard: Aun no llega.
Renata: VE POR ELLA. EMMA, EMMA DEBE ESTAR EN SU CONSULTORIO.
Los dos salieron corriendo, necesitaba calmar a Bastian, no quería que se lastimara y no poder hacer nada por él.
Renata: Tranquilo… tranquilo.
Sostuvo mi mano con fuerza, unas lagrimas se deslizaban sobre su mejilla… Negué con la cabeza… él trataba de respirar manteniendo el control.
Renata: ¿Qué hago? ¿Cómo lo hago?
Miré hacia un lado, estaban los guantes que usaba Siena para cualquier momento, no lo pensé dos veces, me puse uno en cada mano, no sé de medicina, pero Bastian estaba sufriendo, no sé si ese tubo le estaba causando dolor o lo lastimaba.
Renata: Debes ayudarme, tienes que estar tranquilo.
Negó con la cabeza, abrí y cerraba sus hermosos ojos, cerró los ojos con fuerzas mirándome. Dejé caer una de mis lagrimas, aun no sabemos si pudiera tener algún tipo de secuelas, por eso era importante su presencia de Siena.
Renata: voy a retirar el tubo, pero necesito saber si te duele en que lo voy retirando.
Cerró sus ojos una vez, quizá era una aprobación, tragué saliva acercando mi mano hacia el tubo… quité las cintillas que lo mantenían fijo, levanté la mirada hacia su frecuencia cardiaca que estaba super acelerada. Lo miré asintiendo con la cabeza, él tenía puesto su confianza en mi, así que de mi dependía que estuviera bien.
Lo miré empezando a jalar el tubo, él tragaba saliva cerrando los ojos. Su pecho subía y bajaba demasiado rápido. Sostuvo mi mano ayudando a cuidar la manera en que lo iba haciendo. Me detenía por momentos, asintió con la cabeza siguiendo retirando el tubo. Santos cielos, era demasiado largo que no se terminaba en salir.
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Capítulos Sin censura: Mi Infierno... en el Infierno
De Todo2da parte de la novela: Mi Cielo... mi Infierno...