Luna:
Sali ya estaba esperando después de mandarla a llamar, la miraba con una pena, solo pensar en que la pudo hacer, llegar a tanto, inclusive en traicionar, en lastimar cuando por las palabras de su padre, ella también ha sido victima y no se ha dado cuenta, pero la venda de los ojos la tenía tan atada que por más que se le pudiera decir algo en contra de Semion ella lo negaría.
Lucio: ¿Estas lista?
Luna: No, pero tengo que hacerlo.
Sonreí pasando mi mano por el abdomen de Lucio, él me sonrió asintiendo con la cabeza, abrió la puerta donde el oficial dejó que entrara, ella se dio la media vuelta rodándolo ojos y cruzando los brazos, si para ella era cansado el hecho de estar visita en visita de nosotros, era lo mismo que sentíamos en tener que lidiar con una persona como ella. Lucio entró quedando cerca de la entrada y a la misma distancia el oficial, cerraron la puerta.
Sali: Ya estoy harta de todos ustedes.
Luna: Lo sé, pero pronto pasarás a otras autoridades donde espero que no te harten tanto como nosotros.
Sali: Abogados, fiscales, oficiales, todo lo que tenga que ver con ustedes no me interesa.
Me senté frente de ella, tenía una mirada muy dispersa y fría, la buena vida en el reformatorio la empezaría a extrañar desde el primer día que pise la prisión.
Luna: Lamentablemente Sali, para ti, en dos 2 días cumples la mayoría de edad. Eso significa que dejarás el reformatorio.
Sali: POR FIIIIN, no sabes que feliz me hace eso.
Luna: Si, pero como tu padre no ha podido pagar un solo abogado y no creo que lo haga, es más ni tu mismo enamorado Semion ha dado la cara por ti, no tendrás derecho de libertad condicional y menos libertad bajo palabra.
Levantó una ceja ahora si, disgustada por lo que decía.
Sali: Mi padre debe estar buscando al mejor abogado que pueda contra ese Bastian.
Luna: Seamos sinceras, ni un abogado con experiencia, menos un abogado traído de donde sea le dará pelea a Bastian, tenemos el caso ganado.
Sali: Por favor abogaducha… sé de donde proviene, sé quien es usted y lo que le gustaba hacer antes de casarse con…
Ella giró un poco su cuerpo mirando a Lucio, pasé la mirada a él, pero para Lucio lo que fuera a decir en mi contra, ya lo sabía todo, no era nada nuevo que quieran atacarme de la manera más baja que hablando de mi pasado. Se puso de pie caminando hacia Lucio, solo la miraba cuando reposó su mano en el pecho de él. La sostuvo negando con la cabeza.
Lucio: No soy Semion Moguelevich, no soy el tipo de hombre que estaría con una niña como tú.
Apartó sus mano de mala gana sonriendo en forma de burla.
Sali: Claro, conmigo no… pero ¿Qué tal Brisia? Pasó por muchos hombres, se acostaba con ambrosio gritando su nombre, menor de edad y tú, el rector de la universidad de leyes. Brisia no solo era un ángel hermoso, era lo que tu mujercita no puede ser.
Entreabrí mis labios al ver a Lucio que Brisia era un tema que no le gustaba hablar…
Luna: BASTA SALI.
Lucio: Brisia, no, ella no es igual a ti, lo has dicho, fue una mujer que amé, que respeté y que hubiera dado cualquier cosa por que hubiera hablado en vez de callar. Tu no te callas y hablas de más.
Dio un paso acercándose hacia ella.
Lucio: (susurrando) No eres de la importancia de nadie. Brisia al menos no la querían dejar ir, Luna (mirando hacia Luna) tampoco la querían dejar, eran las principales, pero tú. Estas muy sola.
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Capítulos Sin censura: Mi Infierno... en el Infierno
De Todo2da parte de la novela: Mi Cielo... mi Infierno...