55. Iluminados.

784 54 9
                                    

NARRA GUIDO

Ema estaba en la cocina, había estado un poco distante por la situación incómoda que sucedió en el ascensor, pero yo sabía que ya no estaba enojada.

- Amorrrrr - Gritó dirigiéndose a la habitación en donde estaba acostado.

- ¿Que pasa linda?

- Tengo calor...

- Mmmm, ¡sacate la remera! - Le dije para ver su reacción

- Tonto... ¡Quiero helado!

- Uy... bueno. A ver... ¿Que sabores queres?

- Para... - Dijo poniendo su dedo en la barbilla, y apoyándose contra el marco - Menta granizada y chocolate con almendras

- Diaghhhhh - Dije yo. Odiaba la menta - Bueno, traigo un kilo y esos dos sabores son tuyos, yo me compro otros mas.

Ella se rió y asintió. Me sente para ponerme los borcegos y caminé para agarrarla de la cintura y besarla.

Cada vez que me acercaba a su cuerpo podía notar un pequeño temblor, y cuando recibía un beso su piel se erizaba.

Era emocionante y hasta un poco halagador que yo fuera quien creaba esa reacción en ella.

- Anda antes de que sea mas tarde. ¡Te amo! Tené cuidado.

La mire y asentí. Con las llaves en una mano y el celu en la otra me dirigí hacia el subsuelo.

Cuando llegue, el auto seguía esperando para una nueva aventura.

Pero, todo tenía que interrumpirse, siempre. Era la ley de mi vida.

- ¡Rubio!

Una Eugenia mas alta de lo normal y mas maquillada que de costumbre venia hacia mí, pidiendo un favor.

- Mmmm, ¿Qué pasó? - Dije un poco seco

- Se que ya te lo he pedido, pero ¿podrias llevarme a un lugar? Esta re cerca de aca. Porfa...

La mire sin responderle y le señale el vehículo en forma de que podía ser mi acompañante.

Ella sonrió y corrió con sus zapatos hacia el asiento del copiloto.

Pasaron diez minutos desde que habíamos salido hacia su destino.

- Euge, se que no es nada cortés negarte el que te lleve, pero yo se que no tenes problemas para pagarte un taxi o un avión, ¿Entonces porque concurris a mi cada vez que me voy?

Ella se puso nerviosa, pero luego me contesto:

- Es que por ahi la gente me reconoce y me "acosa" con fotos y esas cosas, trato de ser precavida con las direcciones de las que vengo y a las que voy...

Eso era cierto, pero su tono no me dejaba clara la situación.

- Guido... además... es muy obvio

- ¿El que? - Dije con la vista al frente

- Que aún te amo. En serio, no te voy a superar, por mas de que hayamos estado poco tiempo juntos, y por mas que ahora estés con Ema...

Yo estaba atónito. Solo habia salido a comprar helado y recibo esto. El destino me tiene algo grande preparado, pero con Ema.

Eugenia miro al frente y no dijo nada mas durante todo el viaje.

Cuando llegamos al pub, ella me abrazo. Mala idea.

Millones de flashes cayeron sobre nosotros, y eso no era una buena señal.

Me separe bruscamente de ella, y se dio cuenta de que debía bajarse. Pero antes...

- Pensalo bien Armido. ¿Ema vale tanto como yo?

Ella se bajo, y salí a toda velocidad de esa zona.

Cuando llegue a la heladería favorita de mi novia, me baje y compre lo que me había pedido.

- ¿Que más? - Me dijo el chico que me atendía

- Y... a ver, mascarpone con frutos del bosque, y frutilla.

El asintió y siguio colocando el helado en el interior del envase hermético.

Eran las 9:30 de la noche y Ema seguramente se iba a preguntar en donde podía estar.

Cuando llegue al edificio, estacione en el subsuelo, y subí a nuestro piso.

- ¿EN DONDE ESTABAS? - Me pregunto alterada.

- Habia mucha gente en la heladería... - Mentí.

Ella sonrio lentamente y fue en busca de sus compoteras para helado. Hubiera preferido decirle, pero se que no lo iba a entender. Y prefería que eso muriese conmigo.

Nos sentamos a ver una peli en el sillón, y ella en realidad se concentraba mas en el helado que en otra cosa.

Me puse a revisar el grupo que tenía con mis hermanos en WhatsApp, y observe la luna en la imagen que Gastón habia encontrado.

Era hermosa. Grande y dorada, brillante como los ojos de Ema cuando la miraba.

Me daba grandes ideas para el disco.

Pero me enfoque mas en caracterizarla con mi situación actual. Ema y yo eramos como los mas inocentes del grupo... según ellos ja. Como el lado iluminado de la luna.

Pero esconderle lo sucedido con Eugenia me hacía sentir como la parte oscura, como si no fuese real.

Simplemente no quería que pensara cualquier cosa de mi. Debido al reciente espectáculo de la señora del ascensor, tal vez Ema se sentiría insegura conmigo si le cuento porque tarde tanto.

Por eso prefería dejarlo ahí, seguir brillando con ella, con tanta intensidad como nunca lo había hecho. Porque nadie nunca me había dado tanta luz como ella.

-----------------

Hola hola que tal, aca esta lo prometido.

Como verán, he estado comparando a las tres parejas con la luna. Esto se debe a que además de ser super fan de ellos, soy fan de la luna. Y además, lo relacione con el tema del nuevo disco, y en "Vivamos el momento" se puede notar bien esto.

Bueno, también pasaba para decirles que hace unos dias, conocí a una espectacular escritora con ideas reveladoras que me parecieron reeee copadas. Ella es MarcyAberdeenGNR y su novela es "La prima lejana". En verdad, es una espectacular escritora, asi que si les gusta leer historias con los chicos recomiendo sus obras totalmente!

Bueno, esto ha sido todo por hoy. Espero que les guste, y arriba les colgue la imagen de la luna a la que me refiero en estos últimos caps.

Bueno, nos vemos el próximo viernes! Arrivederci (o como se diga) ♡♡♡

¿Dónde mueren las promesas?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora