¿Dónde mueren las promesas?

108. Aún queda algo.

NARRA GASTÓN

Frente a la habitación, en la puerta de emergencia, una sonrisa malvada se asomó, y la puerta se cerró.

- Hola... - Una sonrisa embriagadora me sorprendió repentinamente, pero esta vez en la puerta de mi habitación.
Mi corazón dejo de palpitar. Y una voz sutil en el fondo apareció gritando mi nombre. Mai estaba ahí, pero todo iba en cámara lenta. Hasta que mis ojos se cerraron, y todo se volvió oscuro.

- ¡Gastón! - La voz de Lucía resonó en todo mi interior y mis ojos se abrieron de golpe.

Paula estaba frente a mí con su cara de preocupación, mientras yo reposaba en el suelo de la habitación.

- ¿Que pasó? - Dijo Paula inevitablemente sorprendida

- Pensé... que eras alguien mas...

Paula abrió los ojos rápidamente y miró fugaz a Lucía, quien no se percato de la mirada porque sostenía mi cabeza en sus piernas.

Un chico del hotel preguntó si estaba todo bien, y nos dejó algunas toallas por las dudas.

Lucía intentó subirme a la cama, pero tampoco estaba inmovil.

- Dejame ayudarte - Exclamó con amabilidad.

- Estoy bien, Lu - Dije esbozando una pequeña sonrisa para disminuir la preocupación.

- Bueno... yo solo pasaba para avisarles que ya estabamos acá... Ema y Guido están en la habitación de ellos, y Pato esta subiendo algunas cosas, si necesitan algo nos llaman...

Lucía asintió y despidió a Paula en la puerta.
Paula preguntó si los intercomunicadores de las habitaciones podrían estar conectados entre sí, y desde la recepción lo aceptaron. Verdaderamente es el hotel en el que mas días estuvimos, y en el que mejor nos han tratado.

- Gastón... ¿que pasó?

- Nada Lu, me asusté porque no esperaba a Paula, es muy tarde, deberíamos descansar...

- Mirá, vos no sos tus hermanos, y yo no soy como Ema y Paula que "aceptan" una respuesta poco elaborada para después sacar sus conclusiones y tener razón... - Se me escapó una risa, no es que las chicas fueran muy astutas, mis hermanos son bastante poco creíbles - Yo voy hasta el fondo de la situación, siempre...

- Me asusté, tuve un recuerdo... - Mai volvió a mi mente y me pregunté si por un segundo había enloquecido - Pero claramente era Pau...

- Yo se que te sentís raro, pero si necesitas hablar con alguien estoy acá, y sino podés contactar a algún profesional... es algo bueno...

Claramente no estaba en mis planes contarle a nadie lo que imagino a veces en la oscuridad, y lo que parece mas real de lo que en realidad es... espero.

La verdad es que me preocupaba esta situación, pero jamás dejaría que sobrepasara mis buenos momentos.

Lucía me abarazo, ambos dormimos tranquilos. Esa noche solo soñé con campos abiertos, luces, y el último rayo del atardecer.

NARRA GUIDO

Ema estaba en el baño, tal vez las pastas le cayeron porque llevaba como media hora ahí...

- ¿Ema estas bien? - Pregunté entre risas

- Guido, tengo asuntos en el baño... al igual que los hombres - El eco de su risa en el baño me causó mas gracia, pero espero que no se refiera a lo que yo pienso...

Dos minutos después, Ema apareció con un pequeñisimo vestido negro tipo pijama, o algo así.

No sabía que ibamos a adelantar la luna de miel, pero si hay dos por mi está muy bien...

- No creas que es una luna de miel - Mis expectativas murieron ahí - Aún seguimos siendo novios...

Una sonrisa pícara sobre los labios de Ema me hizo entender que aún había esperanzas.

De repente me abalancé sobre ella, y sus labios atraparon los míos con un enorme beso. Sus brazos rodeaban mi cuello, y sus dedos paseaban por mi espalda. Su pelo, como de costumbre, olía a flores. Su cuello simplemente guardaba su perfume embriagador.

Sus piernas se enredaron en mi cintura y supe que no era un juego. Una sonrisa se asomó en sus labios y yo también sonreí...

- Para... - Dijo entre gemidos - ¿Puedo preguntarte algo?

- ¿Ahora? - Dije estirando el cuello con los ojos abiertos, señalando la situación en la que nos encontrabamos

- Si... - Dijo ella sonrojada.

Asentí rodando los ojos, y con una sonrisa de lado. A veces me gusta sobrar a Ema.

- ¿Cuando planearon todo? ¿Como sabías que te iba a decir que sí? ¿Que pen... - Mis ojos se abrieron mucho al escuchar esa pregunta

- ¿Me dirías que no? - Un pequeño nudo en la garganta me hizo saber que podría haber fracasado en esta petición y las inseguridades mas estupidas flotaron en mi piel. Supongo que es a veces, parte de lo que el amor representa...

Ema se rió a carcajadas... pero sus brazos me rodearon nuevamente...

- ¿Quién en su sano juicio te diría que no A VOS? Además vos... lo que me sorprende, es que... yo se que nadie nunca es totalmente de una manera, y que las personas cambiamos... pero te conozco Armido, y sos un pájaro libre... y vamos a tener vidas diferentes, y momentos de mucha distancia... y no estoy involucrando a otras personas en esa distancia, pero va a ser muy complejo... ¿estas seguro de que queres que sea yo quien ocupe ese lugar?

No podía creer lo que Ema me planteaba

- Ema... mirá, no te voy negar que me lo he preguntado mucho... aún dudo de si esta fue la mejor decisión que tomé...

Traté de no mirarla a los ojos, pero ver como su expresión iba cambiando atónita mientras pronunciaba esas palabras no tenía precio...

- ¿QUÉ? - Dijo ella mientras se abalanzaba sobre mí para agarrarme con una mínima fuerza, que imagino para ella era mucha, las muñecas - ¿CÓMO QUE NO SABÍAS SI ERA LA MEJOR DECISIÓN?

Esta vez fui yo quien se rió a carcajadas. Me solté de su agarre y en un movimiento era ella quien se encontraba atrapada por mi fuerza sobre sus muñecas.

- Jamás estuve tan seguro de una decisión, fuera cual fuera tu respuesta yo estoy seguro de que te amo con toda mi alma, tanto como para soportarte día y noche... por el resto de nuestros días...

Ella sonrió muy sutilmente, y me atrapó en un beso. Sus brazos, esta vez libres, se enroscaron en mi cuello. Sus manos recorrían nuevamente mi espalda, y un pequeño empujon de su parte despertó todo lo que había en mí.

Absolutamente cada milimetro cúbico de Ema era embriagador, y adictivo.

- Pero... Como vamos... como vamos a vivir juntos... - Dijo entre mis besos.

- Shh...shhshsh... ya lo vamos a resolver... ahora solo quiero quedarme con vos...

Y ahí se desbordó todo sin control por parte de ambos... como se debe.

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Amigos!! Hola!
Tanto tiempo!
Los saludó desde acá, desde un panorama mas feliz a nivel global... he estado como siempre, ocupadísima a nivel académico, así que no les prometo mucho, pero al menos dos caps al mes sí... le queda poco a esta historia, y tal vez es mi subconsciente quien no quiere soltar... y por eso no me deja escribir 😂
Pero en fin... espero que disfruten este cap, y los próximos!
Al comienzo de este nuevo cap pudieron leer que Gastón aún esta preocupado por la situación sucedida con Mai en el pasado... ustedes que piensan? Que debería hacer el? Les ha pasado de sentirse abrumados y no saber a quien recurrir?

Por mi parte, siempre cuentan con un espacio abierto para expresarse, y si en algun momento se sienten abrumadxs como el, no duden en hablarlo con alguien, con quien sea, conmigo, con amigos, o ayuda profesional, siempre esta bueno hablarlo, y que sepan que todo todo tiene una solución!

Bien, con ese mensaje los dejo, y espero que difruten de leer tanto como yo de escribir, nos vemos pronto! Gracias por quedarse por acá...
Saludos 💘