𝘿𝙚𝙖𝙙 𝙄𝙣𝙨𝙞𝙙𝙚 ᯽ ꜱᴇʙᴀꜱᴛɪᴀɴ ꜱᴛᴀɴ

𝘛𝘩𝘦 𝘏𝘢𝘳𝘳𝘪𝘴𝘰𝘯'𝘴

｡.｡:+* ﾟ ゜ﾟ *ᴏᴍɴɪꜱᴄɪᴇɴᴛᴇ * ﾟ ゜ﾟ *+:｡.｡
𖥸

7:30 am

Era temprano en la ciudad de Nueva York y ya se podían escuchar los estragos que el tráfico en Manhattan causaba. Apenas se asomaba el sol y aún se veían las luces de los millones de edificios que decoraban la ciudad donde la estatua de la libertad se encontraba.

La neoyorquina tomó la miel del estante y la esparció por los waffles que ella misma había preparado. Termino de hacerlo y tomó la tetera donde el café caliente se encontraba listo para servirse. Lo vertió en una taza y tomó el plato.

—Waffles con miel y fresas, café negro con poca azúcar a la orden.— Olivia sonrió mientras colocaba el plato y la taza sobre la mesa.

—Uhh, se ven deliciosos.— Patrick relamió sus labios al ver el platillo frente a él. Estaba a punto de tomar un bocado con su tenedor, pero la de cabellos castaños oscuros lo detuvo.

—¡Espera!—

Patrick elevó una ceja confundido. Olivia se giró y tomó la crema batida de la alacena, se volvió a acercar a él y comenzó a esparcir la crema por encima de los waffles que ella le preparo. Sonrió ampliamente y su dedo limpió el rastro de crema, para después llevarlo a sus labios.

—Listo, puedes comerlos.— Harrison asintió gustosa.

Patrick le sonrió a la castaña y asintió, tomando un bocado con el tenedor para después llevarlo a sus labios. Al sentir el sabor dulce de este, cerró sus ojos y gimió con suavidad. Olivia solo pudo mirarlo con una sonrisa divertida.

—Solo a ti te salen así de ricos.— Jensen murmuró mientras relamía sus labios y sentía el sabor dulce de la miel en estos. —¿Como le haces? ¿Algún ingrediente secreto?— sonrió con malicia mientras sus cejas bailaban con diversión.

Olivia soltó una risita.

—Tal vez, pero es secreto.— se encogió de hombros, siguiéndole el juego al hombre frente a él.

—Prometo no decir nada.— Jensen hizo como si cerrara un cierre en su boca, haciendo reír a la neoyorquina.

Olivia recargó sus codos sobre la mesa para acerase a el y susurrarle.

—El ingrediente secreto es... mucho, mucho amor.— susurró con una bonita sonrisa adornando su rostro.

Patrick sonrió ampliamente y volvió a tomar otro bocado, gimiendo de nuevo complacido con el sabor del platillo.

—Me encantan.— el castaño susurró y se inclinó hacia adelante para besar sus labios castamente. —Tu me encantas.— susurró sobre sus labios.

Olivia no pudo evitar sonreír embobada por la cercanía de su novio y volvió a besar sus labios castamente.

—Come rápido, se te va a hacer tarde.— Harrison asintió y se alejó de él para servirse un poco de jugo.

Escuchó un jadeó de sorpresa por parte de Jensen.

—¡¿Que hora es?!—