𝘿𝙚𝙖𝙙 𝙄𝙣𝙨𝙞𝙙𝙚 ᯽ ꜱᴇʙᴀꜱᴛɪᴀɴ ꜱᴛᴀɴ

𝘌𝘮𝘱𝘵𝘺

｡.｡:+* ﾟ ゜ﾟ *ᴏᴍɴɪꜱᴄɪᴇɴᴛᴇ * ﾟ ゜ﾟ *+:｡.｡

Bill Sprouse. Bill Sprouse. Bill Sprouse.

Aquel nombre se repetía una y otra vez en los pensamientos del rumano ya que era lo único que escuchaba durante todo el tiempo que iban en el auto, el conduciendo mientras Olivia hablaba de aquel chico que apenas acababa de conocer.
Ella no lo notaba, pero de vez en cuando tenía que tomar el volante del auto con fuerza para intentar canalizar su molestia e irritación.

—¿No crees que fuiste muy ingenua, Olivia?— llamó su atención sin dejar de ver el camino.

—¿Por que lo dices?— la menor frunció el ceño.

—Bueno...— el rumano sonrió sin gracia. —Literalmente acabas de conocerlo y ya te pidió un favor. Y tu... pues lo hiciste, ahora su hermano el cual no conocemos trabajara en la empresa de tu familia. ¿No crees que fue muy ingenuo de tu parte?—

Olivia suavizó su semblante y dejo de mirarlo para pensar bien sus palabras. Sebastián la miraba fugazmente para evitar distraerse del camino pero por supuesto que notó la angustia formarse en sus gestos. Allí comenzó a sentirse ligeramente culpable...

—P-Pero fue muy dulce de tu parte, Liv.— habló con rapidez, colocando su mano sobre su muslo para estrujarlo con la intención de reconfortarla. —Eres muy dulce.—

Olivia pareció calmarse, aunque el seguía tratando de ocultar el inexplicable desprecio que sentía por aquel chico.

—Esto es raro.— la voz de su mejor amiga interrumpió sus pensamientos.

—¿Raro?— Sebastián la miró un momento para después regresar toda su atención al camino. —No entiendo.—

—Es que... ningún chico me había hablado antes. Solo tu, obvio. Y bueno, ya sabemos que lo de Patrick fue... una mentira.— Olivia carraspeó. —Nunca nadie me había hablado por voluntad propia, y si lo hacían era por un reto o una apuesta.— rió en un suspiro aunque ambos sabían que no le daba nada de gracia recordar aquellos "incidentes" —Pensé que Bill estaba hablándole a alguien más cuando me habló.—

El rumano no hizo nada para ocultar su ceño fruncido.

—¿De que hablas? Todo el mundo quiere estar contigo. Eres Olivia Harrison.— Stan sonrió con confusión.

Olivia rió mientras negaba, lo cual lo confundió aún más.

—Si, soy Olivia Harrison y todo el mundo quiere estar conmigo. Si es así, ¿Por que solo he tenido una pareja en toda mi vida? Ah, y la cual me engañó todo el tiempo, por cierto.— Olivia explicó con una sonrisa mientras lo miraba con una ceja alzada.

Sebastian no supo que decir, solamente miró en silencio a la chica quien, con su silencio, asintió mientras su sonrisa desaparecía poco a poco.

—Quizá deba dejar de emocionarme por algo tan simple. Un chico me habló y siento como si hubiera ganado el premio Nobel. ¿Más patética no puedo ser?— Olivia bufó y desvió la mirada con vergüenza.

—Hey, no hables así.— Sebastián rápidamente la detuvo. —No eres patética. Acabas de salir de una fea relación y es normal que te emocione que hayas conocido a alguien nuevo.— sonrió con sus propias palabras, pero esa sonrisa no duró mucho ya que una pregunta repentina llegó a sus miles de pensamientos. —Sprouse... ¿Te gusta?—