𝘿𝙚𝙖𝙙 𝙄𝙣𝙨𝙞𝙙𝙚 ᯽ ꜱᴇʙᴀꜱᴛɪᴀɴ ꜱᴛᴀɴ

𝘔𝘰𝘮 𝘢𝘯𝘥 𝘥𝘢𝘥

｡.｡:+* ﾟ ゜ﾟ *ᴏᴍɴɪꜱᴄɪᴇɴᴛᴇ * ﾟ ゜ﾟ *+:｡.｡

—Por eso tengo que hacerlo bien, perfecto. No puedo... no puedo fallar esta vez.—

Sebastian se mantuvo en silencio. Sus palabras retumbaron en su mente y cobraron más sentido al ver la angustia en sus ojos grises. Olivia estaba asustada, estaba asustada por "fallar" de nuevo, por "decepcionar" a su familia que ni siquiera se dignaba a darle una oportunidad.

—¿Ves? Por eso no quería que tomaras este trabajo.— Stan sonrió sin gracia. —Sabía que pasaría esto...—

—Solo...— Olivia tragó con dificultad y se volvió a sentar en su escritorio para seguir con lo suyo. —Déjame sola, necesito hacer esto.—

—Y tú pareces no entender, Olivia.— el rumano ignoró su petición y se acercó a ella, recargándose en su escritorio mientras sus ojos azules la miraban intensamente. —Te dieron un maldito mes para hacer el trabajo de por lo menos medio año. Y tú pareces no entender que no necesitas llegar a estos extremos para demostrarle a tu padre que puedes hacerlo. Yo creo en ti, yo creo que tú puedes hacer esto y más, no tienes porque demostrarles...—

—Si tengo que.— Olivia lo detuvo con firmeza, mirándolo con sus ojos grises. —Si tengo que demostrarles, porque tienen que saber que yo si puedo, no puede ser que sea la única en la familia que no es relevante. Maggie es fantástica en lo que hace con la revista, Scott no tarda en dirigir la empresa. ¿Y yo? Yo solo estoy aquí esperando a que me den una oportunidad para demostrarles de lo que soy capaz.— sentía su corazón later con rapidez conforme hablaba. —Tu bien sabes que mi papá no me da estas oportunidades, y es una especie de... milagro que haya pasado. Así que... por favor, vete. Tengo que hacer esto. Déjame sola.— terminó.

Sebastián la miró en total silencio. Olivia sentía su corazón romperse ya que no le agradaba discutir con el único amigo verdadero que tenía, pero solamente quería continuar con su trabajo y nada más.

Negó sin saber que decir y tal como ella le pidió, salió de su oficina, dejándola sola por fin.

Olivia soltó el aire que tenía contenido cuando el silencio reino su oficina. Maldijo entre dientes cuando las lágrimas comenzaron a bajar sin control. Las limpió con brusquedad y volvió a abrir su computador para seguir con su trabajo.

Sebastian camino por los pasillos del edificio tensando la mandíbula para evitar maldecir en voz alta. Su camino se vio interrumpido cuando diviso a la hermana mayor de los Harrison, conversando con su novio despreocupadamente. Suspiró erráticamente se dirigió hacia ella.

—¿Cual es tu puto problema, Margaret?— preguntó ignorando por completo la presencia de su novio.

—Hey, no le hables...— John estaba por defenderla pero Margaret lo detuvo.

—¿Me das un momento?— le pidió con una ligera sonrisa.

John no muy seguro de su petición, se despidió de ella y se alejó.

—¿Cual es tu problema, eh?— el rumano volvió a preguntar cuando estuvieron a solas.

—¿Ahora que, Sebastián?— Margaret rodó los ojos y se cruzó de brazos.