Mortem (1)

Capítulo 90 La inesperada esperada cita.

Estaba nerviosa, pero desde fuera no lo parecía, porque Olivia era así, estoica hasta el final. No se había dado cuenta de que tenía una cita hasta que lo había hablado con los demás, y para ser sinceros era una novedad viniendo de ella. No solía quedar con nadie, a pesar de que hace algunos años había tenido alguna cita esporádica con algún que otro hijo de las amigas de su madre, pero la gran mayoría solo te hablaba de lo bonito que era el caballo, o lo interesante que era la adquisición de sangre del extranjero. Pero ¿un licántropo? Eso era nuevo y en el fondo se podría decir que le gustaba.

-Oli.

-¡Ah!-La bruja dio un salto de la impresión.-¡Qué susto me has dado!

-Ay lo siento Olivia.

-Oli.

-¿Qué?

-Que me llames Oli, no me gusta que me llames Olivia, es muy serio.

-Vale Oli.

Entraron en la biblioteca, a esas horas del día solo había uno o dos alumnos dispersos estudiando para las recuperaciones, así que era el sitio más tranquilo para quedar. Se fueron a la planta superior, que era un pequeño conjunto de estanterías que se cernían sobre unos sofás muy cómodos. Allí podrían hablar con calma, durante el día había sacado en conclusión dos cosas, la primera es que aquello era una cita, y la segunda es que iba a cortar con Sammy por lo sano, era un niño de primero y ella una chica de bachillerato, por muy alto y fuerte que se hubiera vuelto el licántropo durante el invierno, no dejaba de ser un niño que no conocía el mundo en el que vivía.

-¿Nos sentamos aquí?

-Sí.

Se sentaron en un sofá grande, Sammy estaba tan recto que Olive, de no haberlo visto en el laboratorio en el semestre pasado, hubiera pensado que era un vampiro.

-¿Estás bien?

-Estoy nervioso.

-Yo también.

-¿Tú? ¿Nerviosa? No me tomes el pelo por favor

-No te tomo el pelo Sammy

-Sam.

-¿Perdona?

El chico se giró y la miró serio.

-Quiero que me llames Sam, no quiero que me veas como un niño, Sammy es nombre de niño.

-No lo es.

-Sí lo es.

-A mi me gusta llamarte Sammy.-Oli se sentía demasiado cómoda con él, por primera vez en la vida se sentí a gusto con alguien que no viera en ella una posición clasista o una riqueza.-¿Puedo llamarte Sammy?

-Puedes llamarme como quieras

-¿Incluso cielito?

-¡No!¡Eso no!-El la miró y comprendió que tan solo le tomaba el pelo.

-Era broma, solo quería que te relajaras, estás tenso.

-Es que es la primera vez que quedo con alguien.

Oli recordaba la primera vez que había tenido que ir a una cita concertada, había sido incómodo y muy muy muy irritante, ¿estaría Sammy forzando algo? ¿Formaría parte de algún plan de su madre y por eso él se había interesado en ella? Seguramente, aunque su madre era bruja, era sabido que las brujas y los licántropos tenían ciertas alianzas, no sería de extrañar que mandaran aunque fuera a uno de primero para acercarse a ella.

-Mira, Sammy, no es necesario seguir con todo esto ¿vale? Mejor hagamos cuenta de que nada ha pasado y ya.

-Pero Yo

-Me tengo que ir a hacer un trabajo, ya nos veremos por los pasillos. Adiós.

Y antes de que el lobo pudiera decir nada, la bruja se había desvanecido.