The Chosen One: Gohan × Mushoku Tensei.

Capítulo 148: Arthur Greyrat

Ahora, a anunciar mi regreso.

Eris podría haber sido ingenua en lo relativo al parto. Es decir, ella también tiene momentos de depresión emocional.

Mientras tanto, Gohan y Zanoba caminaban hacia la casa, sumidos en una conversación tranquila. Había cierta emoción contenida en el aire; Julie, quien había estado bajo el cuidado de la familia de Gohan, pronto regresaría junto a Zanoba. Aunque podría haberla dejado quedarse más tiempo, Gohan sabía que el vínculo entre maestro y aprendiz era algo especial. Ambos estaban deseosos de reencontrarse, y la idea de su reunión llenaba de calidez el momento.

En otro rincón, Ginger continuaba trabajando arduamente. Había asumido con seriedad la tarea de encontrar un lugar adecuado para que Zanoba pudiera quedarse, algo que se había convertido en un pequeño desafío logístico. Aunque el dormitorio de la universidad seguía siendo una opción, las complicaciones surgían por su regreso "oficial" tras notificar su deceso. ¿Podría realmente retomar su lugar en la escuela sin levantar preguntas incómodas?

La graduación estaba a solo unos meses de distancia, lo que hacía que toda esta situación se sintiera como un desperdicio de tiempo y recursos. Pero no todo estaba perdido. Jinas, un aliado confiable con una red de contactos en el gremio de magia, podría tener una solución. Si todo salía bien, Zanoba podría continuar sus estudios, aunque fuera como investigador independiente tras la graduación.

- De cualquier modo, Zanoba, no dudes en venir a verme si necesitas algo.

Dijo Gohan, con un tono que reflejaba tanto camaradería como una sincera disposición a ayudar.

Zanoba, siempre humilde, respondió con una sonrisa tranquila.

- Soy yo quien debería decir eso.

El simple hecho de tener a Zanoba cerca era motivo de alegría para Gohan. Su presencia significaba mucho más que compañía; era una oportunidad para seguir adelante con proyectos compartidos. La armadura mágica, un sueño que ambos habían empezado a construir, no tendría que quedar en pausa. Además, el ambicioso proyecto de las muñecas encantadas seguía siendo una realidad que cobraba forma, un símbolo de lo que podían lograr juntos.

En cuanto al tema de la vivienda, Gohan no veía ningún problema en prestarle dinero si Zanoba lo necesitaba. Aunque entendía que el dinero podía ser una fuente de complicaciones, confiaba plenamente en él. Incluso si no podía devolverlo, Gohan sabía que no se arrepentiría de haberlo ayudado.

Finalmente, llegaron a la casa.

Con el majestuoso treant enredándose alrededor del buzón como si lo protegiera, la casa irradiaba una elegancia propia de la alta sociedad. Cada detalle, desde el camino que llevaba a la entrada principal hasta los ventanales que reflejaban la luz del sol, hablaba de prosperidad y buen gusto. La escena transmitía una sensación de calma, pero también de expectación, como si algo especial estuviera a punto de suceder.

Cuando se acercaron a la entrada principal, Beat, con su habitual precisión, abrió la puerta antes de que siquiera tuvieran que tocar.

- Bueno, espero que Julie no haya sido una carga para la familia de Shishou.

Comentó Zanoba con su tono educado, aunque en su mirada había un toque de preocupación.

Gohan negó con una sonrisa.

- Julie está perfectamente. Ella y Aisha se han hecho grandes amigas.

Antes de que pudiera decir algo más, la puerta principal se abrió de golpe, dejando entrar una ráfaga de energía pura en forma de una pequeña figura de cabello naranja.