La Revancha

capítulo 52

El señor se retuerce en la silla que está sentando ya que contaba que con los papeles que traía fueran suficiente .
El abogado continúa hablando , mirándolo fijamente.
- Además, señor Orson aquí hay facturas pero no veo los contratos que van con esas facturas y también contratos sin las facturas correspondientes, aparte falta los cheques pagados y cobrados de muchos contratos, por lo que vaya usted buscándolos y mañana a primera traiga los, sino ya sabe , no venga y no me haga perder el tiempo ya que no puedo ni quiero perderlo, tengo mucho trabajo que hacer, esta todo claro, señor Orson. Necesita que le escriba en una hoja todos los documentos, contratos , facturas, cheques, etc que tiene que buscar y traer mañana sin falta señor Orson.
El señor Orson, se pone más pálido aún y se afloja el nudo de la corbata.
La señora Orson pregunta, inocentemente.
- Perdone, que le interrumpa pero puede usted mirar mis documentos y decirme si falta alguno, por favor.
El abogado asiente mientras mira los documentos durante unos minutos, a continuación después de repasarlos, se dirige a la señora Orson y le dice.
- Están casi todos, señora Orson, pero lo que no veo aquí ya que entiendo que es usted la dueña de varias propiedades, es el contrato de alquiler del apartamento...
La señora Orson, interrumpe extrañada al abogado diciendo.
- Disculpe señor, que apartamento y que contrato yo no compre últimamente ningún apartamento y mucho lo he alquilado a nadie, tiene que haber un error, permita me ver esos papeles por favor.
El abogado le entrega los papeles a la señora Orson .
Esta los mira y a continuación mira a su esposo y le dice.
- Sabes tu algo de este apartamento y a quien se lo has alquilado y porque no me has presentado el contrato de alquiler, cuando lo has hecho.
El señor Orson intenta hablar pero no puede ya que se ha quedado sin voz y no puede articular palabra alguna.
La señora Orson mira su esposo mientras espera una respuesta, al mismo tiempo que el abogado que ha estado pendiente de las palabras de la señora Orson.
La señora Orson, sigue esperando pero el señor Orson sigue sin poder hablar.
Al ver esto la señora Orson, se levanta y dice.
- Espero que cuando llegues a casa me nuestro el documento de compra así como el contrato de alquiler, y también los recibos de que esa persona ha estado pagando el alquiler,.
El señor Orson no puede reaccionar, ya que no se esperaba que le fueran a pedir también la documentación del apartamento, ni mucho menos el contrato de alquiler ni los recibos.
El abogado continúa revisando los documentos y escribe en una hoja que le entrega al señor Orson.
Este lo mira y no entiende de qué se trata, el abogado le dice.
- Aparte de los documentos y demás papeles que le pedido anteriormente, también debe traer estos papeles, sino no podré asesorarle, señor Orson.
El señor Orson empieza a leer y se pone más nervioso aún al comprobar lo que está escrito en el papel.
Después de varias horas, el abogado da  por concluida la reunión , citándolos de nuevo para el día siguiente a la misma hora, es decir, a las 8 de la mañana.
Se despide de la señora Orson, con un apretón de manos el señor que aún continúa sentado y no puede levantarse, tiene que ser ayudado por el abogado para que se dirija hacia la salida.
Nada más salir del despacho, Antonio se dirige hacia Amelia acompañada por cuatro hombres muy fuertes, musculosos, y que van armados.
Al llegar a su altura. Antonio le dice.
- Ha salido todo bien, querida, te presento a tus guardaespaldas.
El señor Orson mira intranquilo y pregunta a Antonio.
- Porque Amelia necesita guardaespaldas, que ocurre.
Antonio mira a Amelia, pidiéndole permiso y después de que ella acepte , este responde.
- No te has enterado de que han atacado a varias personas estos días y que algunas están gravemente ingresadas en el hospital, dice Antonio ,todo serio mirando al señor Orson.
Este mueve la cabeza negando, y después de ver que no va obtener más información se retira rápidamente.
Mientras en el despacho de Carmen, ella está pendiente de salida de su amiga porque quiere hablar con ella.