La Revancha

capítulo 32

El señor Orson después de colgar piensa en como puede hacer para que su esposa crea lo que le ha dicho ya que si le retira las tarjetas de crédito y le deja una mensualidad como había prometido hacer en caso de que de volviese a ocurrir iba a tener graves problemas tanto con su amante Ágata como los socios a los que debía una fuerte cantidad de dinero y había prometido pagar en los próximos meses y si Amelia le cortaba el grifo se iba a encontrar en graves problemas.
La señora se dirige hacia la puerta de la casa cuando ve como la sirvienta, Rocío, se esconde y decide hacerse la víctima para que no sospecha que la visto.
Llama a su mayordomo Luis, y le comenta con gran pesar que una vez más su esposo la ha dejado toda arreglada y esperando pero que está vez iba a ir sola a la cena.
Rocío, que está escuchando la conversación piensa que el señor Orson ha dejado plantada a su esposa porque está con Ágata.
Luis, el mayordomo que se ha dado cuenta de que la sirvienta está escuchando, le sigue la conversación a la señora Orson.
- Luis voy a ir a la cena y después al baile, di el señor Orson , si viene, diga le que me he ido a la cena y que no me espere levantada y que mañana hablaremos.
El mayordomo, asiente con la cabeza, mientras acompaña hasta la salida a la señora donde le está esperando la limusina que le va a llevar hasta la cena.
Al mismo tiempo, Rocío camina rápidamente hacia su habitación para llamar al señor Orson.
El señor Orson, en esos momentos está totalmente desencajado y cuando suena el móvil no se da cuenta y lo deja sonar, sin coger la llamada.
Rocío, que era la que estaba llamando, al ver que no le responde, se pone toda furiosa y decide que esto no quedará así y que el señor Orson pagará los desplantes .
Rápidamente se dirige hacia su habitación, pero en ese mismo instante, el mayordomo le llama diciendo.
- Rocío, por favor, me puedes acompañar necesito.....
Rocío se gira con brusquedad, pone cara de enfadada y aprieta fuertemente los dientes., contestando de malas maneras al mayordomo y al mismo tiempo varios empleados que en esos momentos pasan por el pasillo ven como su compañera esta actuando, intentan llegar a ella antes de que suelte alguna tontería y se ponga en graves problemas con el encargado de la casa , pero llegan tarde.
De repente, se abre la puerta entrando David, que había ido a visitar a su madre ya que se había quedado con varias dudas después de la conversación.
En ese momento, David escucha como Rocío responde toda Aira y a gritos al pobre mayordomo Luis.
- Deja me en paz, viejo estupido, ahora me voy a mi habitación y no quiero que me molesten para nada.
Todos se quedan callados y David, sin que Rocío, la sirvienta se de cuenta avanza hasta donde se encuentra, le mira a los ojos fijamente, y le señala al despacho con la mano.
- Luis, por favor, nos acompañas al despacho, dice con voz muy seria David.
Rocío, camina lentamente hacia el despacho, le sigue Luis el mayordomo y cerrando la fila va David.
Antes de seguir caminando , se gira y mirando hacia los demás empleados que se encuentran en el pasillo,les dice.
- Por favor, vuelvan a sus quehaceres, intenten no comentar mucho lo que acaban de presenciar. Buenas noches.
Todos a la vez responden.
- Buenas noches , señor .
A continuación se dirigen hacia sus labores unos y otros a sus habitaciones.
David, se gira y avanza hacia el despacho donde le espera la sirvienta Rocío, y el mayordomo.
Después de entrar en el despacho, cierra la puerta y mira fijamente a la muchacha que se encuentra delante de la mesa del despacho muy estirada y con mucha altivez, sin bajar la mirada.
Luis se encuentra situado a un lado. esperando a que David decida como va a actuar ante la situación.
David, se acerca a la mesa , se apoya con las manos en ella y mira fijamente y con una gran dureza en sus ojos a la muchacha, mientras habla con voz muy baja.
Luis , el mayordomo, al ver la mirada y los gestos de David, se retira un poco ya que en pocas ocasiones ha visto esa mirada y cuando la vio , no era nada bueno.
- En primer lugar, Rocío, tú no eres nadie para dar gritos en esta casa, te queda claro, pregunta muy serio David , mirando a la muchacha.
Rocío responde bajando un poco la cabeza.
- Si señor, perdón.
David, continúa
- Las órdenes que da Luis, se respetan, y se habla con educación.
Rocío asiente,con la cabeza, mientras sigue escuchando .
- No se sí mi madre dejarás que sigas trabajando aquí, pero si de mi depende te ibas ahora mismo de esta casa, sin recomendación ni sin liquidación alguna, dice David.
Alza un poco más la voz y continúa.
- Ahora vas a pedir perdón a Luis y te quedarás allí sin salir para nada de tu habitación hasta que yo hablé con mi madre y decidamos entre los dos que va a pasar, está claro, mira a la muchacha esperando una respuesta.
Rocío se gira hacia el mayordomo Luis y dice.
-Perdón, disculpe, estaba enfadada por un tema personal y acabé pagándolo con usted, lo siento. Dice la muchacha toda triste.
Luis, el mayordomo mira a la muchacha, aceptando sus disculpas.
Rocío, sale del despacho, David mira al mayordomo Luis y le dice.
- No me gusta llegar a casa de mis padres y encontrarme con lo que acabo de presenciar, si no sabes controlar a los empleados , avisame y contrataremos a otra persona para eso, está claro, pregunta David mirando a Luis.
- Lo siento señor, dice el mayordomo.
Después de tener el permiso para retirarse, se dirige hacia la puerta, pero David pregunta.
- Por cierto, Luis, donde está mi madre , lo sabes.
El mayordomo responde
- La señora Amelia ha salido a una cena, sola y después iba al baile .
David, se planta delante del mayordomo y pregunta.
- Como, sola, mi madre nunca sale sola, que ha ocurrido.
Después de hacer la pregunta , recuerda la llamada de su madre así como la extraña petición y empieza a entender, aunque aún no sabe que se trae entre manos su madre, sabe que ha pasado algo y que su madre le va a poner un alto y que no se va detener y si eso va a hacer que hará con su hermano Brando, ya que ambos siempre han hecho las cosas juntas