capítulo 99

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Después de haber hablado con la agencia donde compró el coche, el señor Orson continúa desayunando para después salir y resolver todo el lío ocasionado en el banco.
El señor Orson coge el maletín junto con las llaves del coche y el móvil.
Sale de la casa y se dirige hacia el garaje y va hacia donde está situado su coche, pero al llegar allí no lo ve y mira a todos los lados, sin encontrarlo por ningún lado.
Todo furioso se dirige hacia la casa de nuevo, llamando a gritos al mayordomo.
- Luiiiiiiiis, venga aquí ahora mismo.
El mayordomo con toda la calma del mundo, se dirige hacia la entrada donde el señor Orson le espera cada vez más furioso.
Al verlo llegar le pregunta el señor Orson al mayordomo .
-  ¿Dónde esta, donde lo han puesto?.
El mayordomo mira al señor Orson y le pregunta todo extrañado.
- El qué señor, que necesita.
El señor Orson responde.
- Mi coche,  ¿dónde esta mi coche, Luis?.
El mayordomo responde.
- El coche del señor, pues debe de estar donde usted lo aparcó ayer cuando llegó a casa, nadie ha tocado su coche, porque. ¿Qué ocurre señor Orson?, pregunta el mayordomo que no entiende nada.
El señor Orson responde.
- Mi coche no esta donde ayer estacioné,  ni tampoco está en el garaje.
El mayordomo se queda todo extrañado.
En ese momento unos de los jardineros que ha escuchado la conversación, se acerca y pregunta.
- Perdón señor Orson, su coche estaba situado justo a la entrada del garaje pero no dentro.
El señor se gira y responde.
- Si porque , que sabes tú.
El jardinero responde.
- Hoy temprano cuando estaba revisando el jardín que esta situado justo al lado del garaje llegó una grúa, enganchó el coche y se lo llevó.
El señor Orson grita
-  ¿Qué, cómo y porqué no avisaste de lo que sucedía?.
El jardinero responde.
- Hasta ahora no he entrado en la casa y no vi a nadie para avisar señor.
El señor Orson pregunta al mayordomo.
-  ¿Hay algún otro coche que pueda usar?.
El mayordomo responde negativamente con la cabeza.
El jardinero, carraspeo y dijo.
- Yo tengo mi furgoneta de trabajo, y tengo que salir para comprar abono y material, si quiere que le acerque señor.
El señor Orson se gira y responde.
- De acuerdo, espere un momento, tengo que hacer una llamada y salimos.
El jardinero asiente y se dirige hacia la salida donde se encuentra su furgoneta.
El señor Orson llama por teléfono a su hijo David, para que le autorice el pago de un taxi desde el centro hasta la oficina de los abogados y después hasta la empresa, ya que debe pedírselo a su hijo.
Suena el móvil durante varios minutos pero nadie le responde, por lo que se dirige hacia el mayordomo y le pregunta.
-Sabe usted como puedo llegar desde el centro hasta las oficinas de los abogados donde trabaja la abogada de mi esposa.
El mayordomo responde.
- Pues en taxi, o autobús, pero la línea no lo se, tendrá que preguntar al llegar al centro.
El señor Orson asiente y todo furioso se dirige hacia la salida donde le espera el jardinero con la furgoneta, que está toda destartalada y bastante sucia debido al transporte del material del jardinero.
El jardinero que está ya dentro de la furgoneta, espera a que entre el señor Orson ya que tiene un poco de prisa y debe de hacer varios recados.
Después de mirar la furgoneta , el señor Orson mira al jardinero y suspira , si antes estaba furioso ahora esta muy furioso y no puede ocultar su rabia al tener que ir en la furgoneta del jardinero y encima ve como el resto de los empleados, se han parado a observar la escena.
Durante varios minutos el señor Orson va muy callado, no dice ni una palabra, cuando están a punto de llegar a la ciudad, la furgoneta empieza a hacer ruidos extraños hasta que al final se para.
Aunque el jardinero intenta arrancar, el motor de la furgoneta no funciona, por lo que el jardinero mira al señor Orson y le dice.
- Lo siento señor Orson pero se acaba de estropear la furgoneta, es algo del motor, voy a mirar si puedo encontrar el fallo, pero me llevará un rato. Si usted tiene mucha prisa, sé que a unas cuadras de aquí hay una parada de bus, pero no se que línea es.
El señor Orson se apea de la furgoneta, se alisa la ropa y se dirige al jardinero y le dice.
- Gracias por traerme hasta aquí, espero que pueda arreglar la furgoneta.
El jardinero asiente y observa como el señor Orson se aleja hacia la parada del bus.

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