Señorita Oculta

543 57 3
                                    

- ¿Por qué no me lo dijiste?. - Le pregunté por quinta vez en la noche.

- Hayden, por favor... - Su llanto, me dolía más a mi que a ella.

- Escúchame. - Me agaché frente a ella. - Necesito... Tengo que poner a tu padre tras las rejas.

- Ese no es mi padre.

- Yo sé, yo lo sé. - Le limpié las lágrimas. - Lo que te hizo, lo que ha estado haciendo contigo, es... Necesito que hables.

- No.

- Necesito que lo digas, Alice, es por tu bien.

- No, Hayden no puedo hacerlo.

- Alice.

- Él me va a matar.

- Alice, escúchame, tú sabes bien lo que ha hecho, necesitamos ponerlo en una cárcel a que se pudra. - Le dije.

- No puedo. - Cerró sus ojos con fuerza y se hizo un ovillo sobre la cama.

- Alice. - Limpie las lágrimas que también comenzaban a caer de mis ojos. - Si quieres, no hagas esto por mi, no hagas esto por tus hermanos... Hazlo por ti y por Ryan.

Hizo una mueca de dolor y agachó la cabeza mientras que más lágrimas, cada vez más grandes, brotaban de sus ojos hinchados.

- Hazlo por ese bebé.

- ¿Qué?. - Me miró. - Hayden, ¿Cómo sabes de eso?.

- Ryan dejó en mis manos el hecho de que pueda sacarlos del agujera McKenna, ayúdame, por favor.

(...)

Desperté, genial, un nuevo día. Yupi.

- ¿Estás lista?. - Le pregunté, ella estaba sentada en la sala, vestida completamente de negro al igual que yo.

Asentí.

- Alice. - Me agaché a su altura y le peiné el cabello detrás de las orejas. - No importa qué, ni cómo, pero voy a sacarte del agujero en el que estás metida, en el que todos lo estamos. - Sonrió, casi por un segundo, tan hermoso con una estrella fugaz.

- Mi hermano solía decir eso. - Sollozó y llorando se puso de pie. - Tenemos que irnos.

- Está bien. - Asentí, sabiendo que era cierto, a mi me salvó la vida muchas veces, con las mismas palabras.

La llevé a la oficina de Mathew Jensen, mi abogado.

- ... Si está de acuerdo, estoy listo para grabar su testimonio, pero el día del juicio deberá asistir para confirmar que el testimonio es suyo y usarla como testigo, debemos dejarlo en evidencia frente a todo el mundo.

Alice se limitó a asentir.

- Muy bien, voy por mi celular y enseguida regreso.

Pasaron varios minutos, después de colocar una cámara y un micrófono aparte, ambos estuvieron listos y comenzaron a grabar.

- Testimonio de la Testigo Alice McKenna. Diga su nombre completo por favor.

- Alice... - Tembló un poco. - Alice Victoria McKenna.

- ¿Jura decir la verdad, y nada más que la verdad en nombre de Dios?.

- Lo juro. - Dijo, no cabe duda que es una niña, que ese tipo, ese imbécil se encargó de arruinar.

- ¿Que parentesco cumple con el empresario Mark Vincent McKenna?.

- Es mi padre.

- Bien...

Señorita Inocencia: La Ironía de Nombrar. [Andy Biersack y tu] Segunda TemporadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora