Señorita Renacida

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Habíamos ido a una tienda, por ropa nueva y de estilo elegante... No tengo idea de porque, pero, Andy nos obligó a llevarnos la ropa puesta.

Dominik vestía un traje negro, con corbata roja, se veía muy serio como para ser un bebé.

Cuando llegamos a casa, había una cantidad innumerable de autos aparcados en la calle, tal vez, cerca haya un evento.

Bajamos del auto y nos acercamos a la casa para entrar, Andy abrió la puerta lentamente.

- Bienvenida Hayden. - Sonrió y la abrió por completo y entonces, un montón de personas saltaron, vestidos elegantes...

Mi gente.

Mi papá fue el primero en acercarse a mi, me abrazó y me besó en la frente.

- Hayden, te ves bellísima. - Sonreí.

Uno a uno todos comenzaron a acercarse, Wendy, Parker, Robert y Adrianna, Alexey y Camille... Y por lo tanto, Kyle... Habían muchas personas, mi familia sobre todo, y lo que me alivió es...

No tener que volver a verle la cara a Linda... Y a su novio.

- Hayden, te ves radiante. - Sonrió Parker. - Hace mucho que no te veía.

- Será la mejor fiesta de todas. - Canturreó Wendy.

Y ambas se hicieron a un lado para que el resto pudiera saludarme.

- Pequeña. - Robert sonrió y me abrazó y yo lo abracé a él, con fuerza, con toda la fuerza que ese abrazo ameritaba.

Ya hace tiempo que no veía a mi mejor amigo.

- Te extrañé. - Mis ojos se cubrieron de lágrimas.

- Hola cariño. - Adrianna me abrazó y yo la recibí, hace mucho que no la veía, me invadió un olor a perfume Channel, galletas y mucho jabón.

- Te ves increíble.

- Tu igual. - A pesar de ser madre, su figura era la misma, tiene un cuerpo de infarto y el vestido que usa ahora mismo, rojo, con un largo corte en la espalda y un gran escote, lo dejaba en evidencia.

- No, no lo creo. - Andy estaba hablando con Caroline al otro lado de la habitación.

- Linda, por una vez en tu vida, acepta los halagos.

- Si, deberías hacerlo. - Kyle llegó a mi lado, Adrianna agachó la cabeza con una pequeña sonrisa y me miró. 

- Te veremos luego. - Rob y Adrianna se retiraron.

- Hola Hayden. - Me miró directamente a los ojos.

- Hola Kyle... - Sus ojos brillaron un segundo y esbozó una sonrisa. 

- Es una linda ca...

- Hola Hayden. - Alexey se acercó, y Camille iba de su brazo.

- Pequeño, Alexey. - Sonreí.

- Ven aquí, mi pequeña cerebro. - Me abrazó y me levantó en el aire, reí con fuerza y me dejó en el suelo nuevamente.

- Hola Hayden. - Me abrazó Camille, su cabello, era mucho más largo, de seguro es la chica popular de su universidad.

- Camille, cuanto tiempo. - Sonreí.

- Mi mamá te extraña muchísimo, aún se acuerda de ti y de cómo amabas su pastel y sus galletas.

- Eran deliciosos. - Sonreí.

- Te ves maravillosa. - Kyle me miró, sonrió por lo bajo y se marchó.

Señorita Inocencia: La Ironía de Nombrar. [Andy Biersack y tu] Segunda TemporadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora