65. Incógnita

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Buenas gente bella.
Me informó mi bello grupo que en Peru hubo un sismo bastante pesado, por suerte a mis conocidas no les pasó nada, estaban lejos. Espero que, si le toco a algunx de mis lectorxs poco activxs, estén bien.

En realidad espero que todxs esten bien. Pero ya saben.

Los quiero mucho.

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Buenos Aires. Septiembre 2019.

Juan Pablo Villamil.

Despertar solo, no era una de mis ideas.

Un poco asustado, me levanto exaltado pero al llegar al pasillo y sentir el aroma a café, supe que todo estaba bien, aunque bastante intrigado, dudo mucho que Ani esté cómoda preparando comida siendo que apenas puede verla.

Corrí sigilosamente al baño para la rutina de la mañana y salgo directo a la cocina. Algo escondido,  la veo lidiar con su mente y su rechazo mientras cocina, su pelea interna, pero vuelve al ruedo y "toma la sartén por el mango" valga la redundancia de esa metáfora, y continúa con la tarea.

Sentí mi pecho latir bien fuerte. Esta mujer tiene una gran fortaleza y perseverancia, cada minuto que paso con ella reafirmo mis sentimientos, no es una simple estupidez de un sueño tonto. Realmente la amo, desde que la soñé, desde que la vi, desde que me dijo que no tenía oportunidad con ella. Ana es mi destino y estoy dispuesto a pelear por ello, porque creo en eso.

La vida la puso en mi camino siendo que le prometí que me enamoraría de ella en cualquier vida. Comienzo a creer que en mi vida pasada los cielos y los Dioses fueron tan bondadosos de haberla puesto en mi camino. La historia se repetirá? Tendré esta suerte de tenerla conmigo nuevamente? A veces me siento un loco idiota de lo intenso que me pongo. Es que no debe de haber otra respuesta para esta serie de coincidencias.

Sus pequeñas metas se van cumpliendo de a poco. Y ver esa sonrisa de haber logrado hacer el desayuno sin quebrarse emocionalmente me llenó el corazón de alegría. No podría estar más orgulloso. Esto me deja un poco más tranquilo, pero nada está dado por sentado hasta ver al equipo médico que la espera en la clínica.

Nervios por todos lados. Sentía todo de ella, parecía una niña asustada, yo también tenía miedo de lo que dirían pero traté de ocultarlo para no alarmarla.

Estimo que superó las expectativas de los profesionales. Si, tiene una gran pérdida de peso, pero no parecieron dar un parte del todo negativo.

Ahora es mi turno de ser entrevistado.

Si me preguntan... si, moría de miedo. Tenía miedo de que me digan de que no soy adecuado para Ana, de que debería de alejarme. Odiaría que eso pase, porque simplemente lo haría, todo sea para que ella se recupere.

— Juan Pablo...- dice Hernán, quien por cierto, casi me saca un paro cardíaco.— es la primera vez que tratas una persona con trastornos alimenticios?.-

Yo asiento.

— Bien. Con Ana, trataste de alguna manera que no fuese amistad o esta de noviazgo?.-

— Pues, si. Habremos discutido varias veces, habremos intercambiado llanto...-

— Bien.- me interrumpe y deja su lapicera en el escritorio.— te voy a ser honesto. No está fácil la cuestión. Emilia está pasando por la aceptación si, pero su mente se nota que sigue negada. Por el momento estás vos y creo que es por eso que Ana no revela su problema del todo.-

— Dice que...-

— Que no quiere que veas esa faceta de ella.-

— Anoche casi se corta nuevamente en frente mío...-

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