Destino?

105. En orden.

Si hubiese un audio me estarían escuchando un cantito que dice "AC TUA LI ZA CION!!"

Me dicen por cucaracha que tenemos dinámica abierta, que hace mucho que no se hace.

Tenemos un montón de personajes que se fueron sumando, así que ya saben.

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Bogotá. Junio 2021.

Juan Pablo Villamil.

Me temblaban las piernas. En especial cuando escuché cómo Ani levantó la voz.

Esto no iba a ser bueno.
— Okay. Yo ya fui amable con usted. ASÍ QUE SUEGRITA, ME DISCULPA PERO VA A EMPEZAR A MOVERSE QUIERA O NO.-

Los cinco, seis con la doctora, nos pegamos a la puerta y las paredes para escuchar la amena charla.

— No escucho bien, y tu?.- le susurra Moncho a Marto y este niega.

— Esas son las ventajas de dirigir la empresa... puedo faltar un año si es necesario, así que ponete cómoda, si no queres, no lo hagas, pero Encarna, me vas a tener acá rompiéndote las pelotas un buen tiempo, depende de vos y de tus ganas de cuánto me quieras soportar...-

Papá se reía y yo estaba a punto de tener un paro.

— Eres una irrespetuosa...-

— LA irrespetuosa...- levanta la voz.— vino a ayudar a su novio que está lidiando con temas judiciales por dejar una gira porque su madre tuvo un ACV, y eso nos asustó mucho; pero sigue dejando la gira de lado porque su mamá se niega al tratamiento...-

— Pero para qué le dice eso?!.- pretendo agarra el pomo de la puerta pero la doctora me detiene.

—Encarnación te juro que soy capaz de mandarlo de gira, y me quedo con vos, me importa un pepino lo que pienses, ese hijo tuyo te ama con el alma y está destruido y cansado, y lo amo con todo lo que tengo y si quedarme con vos y sacarte de esa camilla para llevarte a casa es lo que va a sacar una sonrisa de su cara...-

— Uysh, Ana...- dice Isaza al escucharla.

Papá seguía conteniendo la risa.

— La matará de otro infarto!.- le grito a susurros.

— Por eso me quedo.- me responde divertida—para reanimarla si eso pasa.-

— Ya hijo.- me calma.— ya era hora de que alguien la sacuda, y esos no íbamos a ser nosotros, no nos haría caso.-

Silencio.

Sólo había silencio dentro.

No escuchamos más.

De repente los tacones de Ana repican a la puerta y esta se abre dejándonos en evidencia.

— Querían pasar?.- con una sonrisa que me advertía que había hecho una travesura.

Y qué travesura, casi mata a nuestra Encarna!

Realmente siento una voz.

No, no es cierto.

Estaba idiota peleando con mi conciencia e Isaza me empuja dentro de la habitación.

— Pero mírese nomás Encarna!! Lista para irse del hospital?.-

Mamá hizo una mueca que le comunicó el desagrado por el que estaba pasando.

— Anahí, me comentaba afuera Mauricio que va a quedarse un tiempito con Encarnación?.-

— Si.-
—No.- responde mamá encima de Ana.

— Lamentablemente para ella, si.- con una sonrisa impecable.