Buenos Aires. Junio 2020.
Juan Pablo Villamil.
— La viva imagen de mi madre hablando sobre estados físicos con su pareja... justo lo que me encanta escuchar por la mañana.-
— Ya, si la envidia mata...-
— Si, quizá sea eso.- poniéndose su casco blanco.— Lista para criticar todas mis modificaciones?.-
— Pfff!.- se pone el casco y agarra mi mano.
En efecto, Ani criticó algunas cosas y felicitó muchas otras, lo que puso de buenas al mimado.
La revisión fue corta, con un marcador rojo indicó las cosas que no coincidían sobre los planos y nos marchamos.
Ani es una multifuncion, verla con este estilo de obras y constructora me intriga mucho.
Luego de almorzar, volvimos al apartamento de Ana y ahí me quedé yo. Dejó su auto y Augusto la pasó a buscar para estar un rato en la oficina. A las cuatro de la tarde nos encontraríamos en la academia para verla ensayar, o algo así dijo.Cuando se hizo el momento salimos tranquilos en su auto, el cual insistió en que lo tenga, y al llegar a la academia, nos anunciamos.
Nos dieron gafetes de visitantes y nos acompañaron a donde estaría Emilia Anahí Oviedo Markhez.
Era una sala con espejos. Vemos de espaldas a una Ana con un vestido negro de tiras con faldón largo que llega más allá de las rodillas, y unos zapatos negros de taco cuadrado. Tenía una coleta al medio, pero todo eso era insignificante al ver quienes estaban frente a ella.
Niñas.
Pequeñas.
Vestidas igual que ella, su profesora de danza flamenca.
Todas nos miran y al notar eso, la profe mira por el espejo y nos sonríe.
— Veo que ya son las cuatro...- mira su reloj.— no, llegaron antes...- se gira a su clase y las invita a que se sienten en el piso de madera.
Todas les hacen caso, incluso sus compañeras que la ayudan a mantener la clase en orden.
Con la cabeza nos pide que vayamos con ella, e Izasa empuja a Marto para que pase.
Esas niñas eran hermosamente pequeñas, entre seis y diez años, pero de seguro.
— Ellos, son mis amigos, los conocen?.-
Todas asienten contentas y una levanta la mano.
— Bien, recordamos sus nombres primero, si? Juan Pablo Isaza, Martín Vargas, Juan Pablo Villamil y Simón Vargas.- señalándonos gentilmente.— Clara...- dándole el espacio para hablar una vez terminó la presentación.
— Bailamos su canción, no?.-
— Si, bailamos El Embrujo, es una canción de su autoría. Alguien tiene alguna pregunta?.-
Todas las niñas levantan la mano.
— Isa... bel...- le dice al darse cuenta de Isaza.
— Vienen desde España?.-
— No somos de ahí si esa es la pregunta, pero hemos estado mucho en España, es más, hemos estado ahí junto con su maestra Anahí.- dice Moncho y Ana niega divertida.
Nuevamente las manos.
— Antonella.-
— Y si no viven allá... dónde viven? Y por qué vinieron hoy?.- moviendo su pequeña cabeza peinada igual que Ani.
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Destino?
FanfictionJuan Pablo tuvo un sueño. Pero no fue cualquier sueño. Fue uno que le transmitió una cantidad ínfima de sensaciones y sentimientos que lo descompaginaron. Luego de despertar y ver que nada de eso fue real, va a tener que lidiar con la realidad y co...