Todo por Alex

Extra | Rafael

 𝑽𝒊𝒆𝒓𝒏𝒆𝒔 25 𝒎𝒂𝒓𝒛𝒐

El sonido de sus zapatos resuena en el lugar. No puede ocultar su agotamiento al llegar a la habitación.

–No están en el pueblo –se dirige al hombre parado frente a la ventana, y se deja caer sobre el sillón,

–Maldita sea –murmura girándose hacia él–. ¿No dejaron al bastardo?

–No, tal parece que lo consideran parte de su familia.

–Eso no me importa Rafael, no me importa a cuántos tenga que tumbar para llegar hasta él –susurra manteniendo los ojos fijos en alguna parte de la habitación.

–Habla por ti –dice y recibe una mirada con desdén por parte de su compañero–. No quiero volver a prisión –reconoce alzando las manos a la defensiva.

–Cobarde –escupe acariciando su crecida barba–. Tan cobarde como tu padre –arrastra las palabras haciéndole enojar más aún.

–Vamos, ya cállate.

– ¿Te jode escuchar la verdad? Bien sabes que si no hubiera sido por mi padre, el tuyo se hubiera ido de este mundo mucho antes de que ese policía...

– ¡Ya cállate! –se levanta del sillón y patea la sucia silla de enfrente.

–Esa... esa es la actitud que necesito cuando lo tengamos parado delante de nosotros. No gastes esa energía.

–Que te den, Jaxon –dice y sale de la habitación escuchando a sus espaldas la risa irónica del hombre.

Ya en la habitación donde pasa largas noches sin dormir, se despoja de la ropa húmeda que lleva.

–Empiezo a odiarlo... pero tiene razón –susurra para sí mismo acostado sobre el colchón que está sobre el suelo.

Empieza a jugar con la navaja que sacó previamente de sus pantalones, con una sonrisa maliciosa dibujada en el rostro.

–No tendré piedad de ti. Oh, créeme. Te va a doler tanto que desearás no haber sobrevivido a ese estúpido accidente.

El móvil vibra cerca de él haciendo que se sobresalte.

– ¿Dónde diablos están? –pregunta al tomar la llamada.

–Donde siempre, Jaxon dijo que era mejor así.

–No me refiero a ustedes, idiota.

–Oh... a ellos. Sí, ya sabemos dónde están los García.