♥ Aquelarre ♥ Chankai [Exo]

62.

—¡Pero quiero ir!

JungMyeon cerró los ojos con pesadez y masajeó sus cienes con cansancio, de fondo escuchaba la burlona y divertida risa de Sehun, quien estaba tumbado en su cama leyendo un libro y se negaba a irse a su Aquelarre. Suspiró invocando paciencia, Jongin estaba frente a él, al otro lado del escritorio con el ceño ligeramente fruncido y un adorable puchero que en ese momento no lograba tranquilizarlo ni encantarlo como otras veces.

—Ya te dije que 'No' ¿Por qué sigues insistiendo?— estaba tan agotado, mentalmente.

—¡Quiero ir! ¿Qué tiene de malo?— refunfuñó el menor.

Volvió a suspirar, Jongin era un niño mimado que lograba enloquecerlo a veces, lo miró fijamente en silencio evocando los recuerdos de su niñez ¿Qué habría pasado si su padre lo hubiera criado? Tal vez se parecerían demasiado, además de que Jongin había crecido en lo que podría considerarse como una época pacífica, así que era entendible (hasta cierto punto) su manera de actuar. No tenía caso seguir negándose, lo sabía y aún así...

—Nini, simplemente, no entiendo para que quieres ir. Ahora eres completamente libre de ir al clan Park...— mencionó, intentando convencerlo.

—Déjalo ir— intervinó Sehun —Apuesto a que quiere que todos sepan que es la pareja del príncipe ese— sonaba divertido pero despectivo al mismo.

Miraron al menor notando como desviaba la mirada avergonzado, así que había dado en el blanco. Daniel, el representante del clan Kang, se había retirado apenas unos minutos atrás después de comunicarles que la reunión había sido adelantada. Ese era el motivo por el cual no quería que su hermano fuera, cuando la reunión de líderes de clan se adelantaba, solo significaba que se trataba de algo serio y muy importante, incluso podría llegar a ser peligroso.

—Jongin...— rara vez lo llamaba así —¿Realmente quieres ir solo por eso?— suavizó su voz.

—Yo... Hermano...— se quejó infantilmente.

—Ya déjalo ir— volvió a intervenir Sehun —De todas formas aparecerá allá, contigo o sin ti— los miró a ambos.

JungMyeon permaneció en silencio viendo la expresión decidida de su hermano, cerró los ojos brevemente y asintió rendido, ya no había más que hacer. Jongin sonrió completamente feliz y salió de la habitación, probablemente hacia la suya para buscar que ropa usar, ambos lo vieron irse y solo pudieron suspirar. A veces era increíble pensar que ese mimado niño ya había alcanzado la madurez y que incluso tenía pareja.

—¿Por qué lo apoyaste?— preguntó mirando los papeles  organizados sobre el escritorio.

—Se escapaba para verse con Park ¿crees que no lo haría ahora?— sonrió de lado y cruzó los brazos.